El Gran Telescopio de Estudio Sinóptico es la cámara digital de mayor dimensión del mundo. Es obra del Laboratorio Nacional de Aceleración del Departamento de Energía de Estados Unidos. Tiene un plano focal de 61 centímetros de ancho y cuenta con más de 189 sensores individuales. El tamaño de sus fotografías es tal que, para verlas, son necesarias 378 pantallas de televisión de alta definición 4K. Es decir, su resolución es tan alta que podría captar una pelota de golf a una distancia de 24 kilómetros, y es capaz de detectar objetos 100 millones más veces que los reconocibles a simple vista.

Y para probar su funcionamiento, los miembros del laboratorio han fotografiado la cabeza de un romanesco, que es una variedad verde de coliflor. Puede parecer algo curioso, pero lo cierto es que las formas y rugosidades que presenta esta planta son perfectas para testar la calidad de los detalles. También han sacado imágenes del grabado conocido como ‘Flammarion’, un grabado que representa el descubrimiento de la astronomía por el hombre.

Su próximo destino es el Observatorio Vera Rubin (OVR) en Chile. Su misión allí es hacer tomas de unos 20.000 millones de galaxias en alta resolución. Así pues, capturará todo el cielo del hemisferio sur durante 10 años a partir de finales de 2022.

Steve Kahn, director de OVR, explicó a la BBC que la cámara “cubrirá aproximadamente 10 grados cuadrados de cielo”, esto es, unas “40 veces el tamaño de una Luna llena”. Avanzó que las fotografías se tomarán cada 15 segundos. Esto permitirá obtener “una secuencia de tiempo” para detectar “qué estrellas han cambiado de brillo” y asteroides o cometas “que se muevan por el cielo”.

SATÉLITES Y CAMPO DE VISIÓN

Una de las adversidades que están estudiando es la posibilidad de que las megaconstelaciones de satélites artificiales que ha lanzado la OVR en los últimos tiempos puedan generar interferencias. Son un seguido de dispositivos espaciales en órbita baja de la compañía SpaceX. Kahn ya ha aclarado que el Observatorio está en diálogo con la empresa para encontrar una forma de limitar esa interferencia en las fotografías.

Además, tiene previsto iniciar conversaciones con otra empresa británica e india, OneWeb, cuyos satélites pueden plantear un problema mayor que los de Space X. Están aún a más altura en el cielo y estarán en el campo de visión del Observatorio y la mayor cámara digital del mundo por mucho más tiempo.