Línea editorial: el PSOE no se da por enterado

Madrid - Publicado el - Actualizado
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La sentencia del Tribunal Supremo sobre la trama de los Eres falsos en Andalucía, marca un hito histórico en la vida política española al desmentir la supuesta superioridad moral del PSOE como partido de Estado y de Gobierno. Por mucho que la intenten oscurecer sus portavoces, salvando la honestidad personal de los principales condenados, Chaves y Griñán, la sentencia corrobora que el partido que lidera ahora Pedro Sánchez mantuvo durante décadas un sistema corrupto al servicio de sus propios intereses en Andalucía.
El argumento de la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, de que no se lucraron personalmente con el manejo de los 680 millones de la trama fraudulenta, no resta gravedad a los delitos de malversación y prevaricación. Resulta un alarde de cinismo que Alegría, en su estreno como portavoz socialista, diga que el sistema montado perseguía un "bien social". Lo que de verdad perseguía era el "bien del partido socialista", es decir, mantenerse en el poder gracias a la trama clientelar orquestada por los principales condenados.
Como dijo ayer el líder del PP, Núñez Feijóo, la Justicia ha hablado y también han hablado las urnas, con claridad, en Andalucía. Sin embargo, parece que el PSOE no está dispuestos a sacar las consecuencias políticas y morales de este escándalo sin paliativos.



