"He visto una voluntad de volver a la vida"
Escucha la Línea Editorial de este miércoles 24 de diciembre

Escucha la Línea Editorial de este miércoles 24 de diciembre
Madrid - Publicado el - Actualizado
1 min lectura1:49 min escucha
El cardenal Pizzaballa ha regresado a Gaza después del alto el fuego. La destrucción material es total. La pérdida de vida humanas es imposible de calcular. Y, sin embargo, hay que reconstruir, avanzar y “no detenerse únicamente en las consecuencias de la guerra”. Estas palabras escandalizan a algunos. Les parece que hablar de recuperación y reconstrucción implica olvidarse de lo que ha sucedido. Nada más lejos de la realidad. El Patriarca latino y la Iglesia católica han estado donde debían.
En la parroquia católica de la Sagrada Familia siguen alojadas 400 familias. La mayoría viven en tiendas de campaña, no tienen dinero para comprar comida y sobreviven gracias a la ayuda internacional. Sin embargo, tienen derecho a vivir y a hacerlo en plenitud. Eso exige generar condiciones que les permitan mirar al futuro. Los niños, ha señalado el patriarca después de su visita, “salvarán nuestras comunidades”.
La memoria de la devastación causada, fruto de un conflicto enquistado que no pocos están interesados en mantener, debiera ser el punto de partida de la reconstrucción. La mirada debe dirigirse al futuro. Y eso solo es posible si la esperanza encuentra un espacio en el que crecer. Lo sufrido en Gaza es de una dureza tremenda, pero la esperanza de la que el cardenal Pizzaballa ha dado testimonio en Gaza a las puertas de la Navidad, es la de un Dios que, en Jesús, se hace carne, y la de una Iglesia que “continuará siendo la luz de Jesucristo” en medio de nuestro mundo. Esta es la esperanza cristiana de la que es testigo la Iglesia y que, como escribió Benedicto XVI, lucha para que las cosas “no acaben en un final perverso”.



