La carta está fechada el 20 de enero de 1993, el día en que Bill Clinton llegaba a la Casa Blanca. Y dice así:

"Querido Bill,

Cuando he entrado en esta oficina hoy, he sentido la misma fascinación y respeto que sentí hace cuatro años, cuando lo hice por primera vez. Sé que tú sentirás eso también.

Te deseo gran felicidad aquí. Yo nunca he sentido esa soledad que otros presidentes han descrito.

Habrá tiempos muy dificiles, dificultados aún más por unas críticas que muchas veces pensarás que son injustas. No soy muy bueno dando consejos, pero no dejes que las críticas te desmotiven o te desvíen de tu rumbo.

Serás nuestro presidente cuando leas esta nota. Te deseo lo mejor. Le deseo lo mejor a tu familia.

Tu éxito ahora es el éxito de nuesto país. Te apoyo totalmente. 

Buena suerte, George"

Fue la primera vez que un presidente de los Estados Unidos dejaba una nota a su sucesor, que además, en este caso, le había ganado las elecciones. El estilo de la misiva, que revela que el expresidente Bush era todo un caballero, muestra como era la política en otra época, si lo comparamos por ejemplo con el estilo del actual presidente norteamericano, Donald Trump, o con las relaciones que mantienen aquí en España los principales líderes polítcos.

En su día, el presidente Clinton aseguró que la carta de Bush demostraba que el expresidente fallecido era "un hombre honorable y decente, que cree en los Estados Unidos, en nuestra Constitución, en nuestras instituciones y en nuestro futuro común".

Todo un gesto que merece la pena recordar con la muerte del que fue Presidente de los Estados Unidos entre 1989 y 1993.