El gobierno de Corea del Sur ha anunciado que varios "objetos no identificados", que se cree que son drones norcoreanos, han cruzado hoy la frontera con Corea del Sur, y han obligado al Ejército surcoreano a desplegar aviones de combate y helicópteros para destruirlos. Se trata del primer incidente de este tipo desde 2017.

Según el Estado Mayor Conjunto surcoreano, a partir de las 10:25 hora local (2:25 hora española) se identificaron varios de estos drones en zonas fronterizas de la provincia de Gyeonggi, que rodea a Seúl. El director de operaciones del Estado Mayor Conjunto, Lee Seung O, ha recalcado que "es una clara provocación por parte de Corea del Norte, que ha irrumpido en nuestro espacio aéreo". "Nuestro Ejército responderá de forma exhaustiva y firme ante estas provocaciones", ha manifestado.

Como respuesta, el ejército del Sur ha enviado aviones y helicópteros de combate para derribar los supuestos drones, que se desconoce por el momento si estaban equipados con armas. Uno de estos aviones, un KA-1, de hecho se ha estrellado en el condado de Hoengsong, 140 kilómetros al este de Seúl, por razones que aún se están investigando. Sus dos pilotos lograron activar el paracaídas de emergencia a tiempo y han resultado ilesos, mientras que el avión no ha producido daños reseñables al estrellarse en terreno agrícola.

Las fuerzas de Corea del Sur han enviado también drones a la zona fronteriza, algunos de los cuales han entrado en territorio norcoreano para llevar a cabo operaciones de vigilancia, incluidas fotografías a "instalaciones militares clave del enemigo".

Los supuestos drones provenientes de Corea del Norte fueron detectados en las localidades de Gimpo y Paju, y en la isla de Ganghwa, todos junto a la frontera. La detección de estas aeronaves no tripuladas ha llevado al Estado Mayor a solicitar al Ministerio de Territorio, Infraestructura y Transporte la suspensión temporal de todo aterrizaje y despegue en los dos aeropuertos internacionales que dan servicio a Seúl, Gimpo e Incheon. Todos los vuelos quedaron en suspenso durante una hora aproximadamente antes de que se recuperara la normalidad en los dos aeropuertos.

El envío de estos supuestos drones se produce en un momento de máxima tensión en la península coreana ante el número récord de pruebas de armas que Pyongyang ha realizado este año y las maniobras militares conjuntas con las que Seúl y Washington están respondiendo. Corea del Norte no se ha pronunciado por el momento sobre el incidente de este lunes.