La llegada de la quinta ola y el avance la vacunación en España ha creado un escenario completamente inesperado.

Juan Pablo Horcajada, jefe de Enfermedades Infecciosas del Hospital del Mar de Barcelona, contó en ‘Herrera en COPE’ que la situación en el hospital es “bastante comprometida con 20 ingresos diarios de pacientes covid, gente joven, también hay personas mayores pero mucha menos que en olas anteriores”

Señaló Horcajada que “en estos momentos tenemos cuatro plantas llenas de covid y pensando en abrir una quinta, y tenemos dos UCI llenas”.

Advirtió el médico que “los jóvenes están teniendo problemas muy graves y serios con ingresos muy prolongados y viviendo situaciones dramáticas” destacando que “ahora mismo la mitad de los ingresados que están en el hospital son menores de 40 años y están graves y en las UCI, necesitan respiradores y están pasando unos días malísimos”.

Tanto es así, que las cifras asustan. El máximo de ingresados en la UCI de este último rebrote se alcanzó el 9 de agosto, con 2.031 enfermos, desde ese día hay una evidente tendencia a la baja que se ha visto exponencialmente en estos últimos días.

La edad de las UCI, en cifras

La media de edad de los ingresados se ha visto reducida casi en 10 años. En la cuarta ola, informa el Ministerio de Sanidad, que la media de edad en las UCI era de 59 años, mientras que ahora mismo es de 51. Casi 10 años menos que indican la efectividad de la vacunación y la inquietud e irresponsabilidad, en la mayoría de las ocasiones, de la gente joven.

Los datos que arroja sanidad, informan que, ahora mismo, los ingresos en UCI de treintañeros se ha multiplicado por 5. De ser un 2% al inicio de la pandemia, es ahora mismo del 10%.

Pese a estas cifras, el grupo de edad con más ingresos es el de los mayores de 60 años. El porcentaje de ingresados en la UCI en la cuarentena , se ha multiplicado por cuatro entre los treintañeros (del 4% al 15%) y ha pasado del 2% al 10% entre los menores de 30 años.

Los niños, en el punto de mira

Los últimos datos de Sanidad elevan la incidencia de los menores de 11 años a 471 y la de 12-19 años a 997 tras haber superado cotas de 1.600.

El número de contagios ha sido la principal diferencia con otras olas, "no porque el virus sea peor en esta edad o diferente, sino porque los únicos susceptibles que ha encontrado el virus son los más jóvenes. Simplemente son los que estaban listos para infectarse", comentó Quique Bassat, ivestigador y epidemiólogo.

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Pese al incremento de contagios este verano -más de 250.000 de entre los 930.000 menores de edad contagiados desde junio de 2020, dos terceras partes de ellos de entre 10 y 19 años-, Bassat asegura que las hospitalizaciones se moverán en rangos parecidos, aunque aumenten en números absolutos.

"Vacunarles es indispensable para que lleguemos a una protección grupal más eficiente. Si no les vacunamos, evidentemente no llegaremos al control funcional de la pandemia" sentenció el investigador.