La juez de vigilancia penitenciaria ha avalado la decisión de la Generalitat de permitir que el exdirigente de CDC Oriol Pujol salga a diario de prisión para ir a trabajar, al concluir que ha mostrado un "alto grado de arrepentimiento" tras su condena por corrupción y que el objetivo es su reinserción. En un auto, la juez de vigilancia penitenciaria 2 de Cataluñaaprueba la decisión de la Generalitat, ante la que recurrió la  Fiscalía, que denunció que la administración le concedió a Oriol Pujol un "tercer grado encubierto" de forma "poco respetuosa" con la justicia por su "decidida voluntad" de que pase "el mínimo tiempo" en prisión por ser hijo del expresidente catalán Jordi Pujol.

 Por el contrario, la juez aprueba la decisión de mayo pasado de los servicios penitenciarios de la Generalitat para aplicar a Oriol Pujol, una semana después de que se le revocara el tercer grado, el artículo 100.2 del reglamento penitenciario, que le permite salir a diario de la cárcel para ir a trabajar, mientras cumple la condenade dos años y medio por corrupción en el caso ITV.

En su resolución, que se puede recurrir, la juez concluye que el acuerdo de la Junta de Tratamiento para aplicar el artículo 100.2 a Oriol Pujol le otorga un régimen flexible "a la vista de la consecución de los objetivos personales y laborales obtenidos por el interno en su programa individual de tratamiento".

 Se trata, según la juez, de un mecanismo para "favorecer el proceso de inserción social y laboral ya iniciado" por Oriol Pujol en prisión, donde ingresó en enero pasado para cumplir la pena de dos años y medio a la que fue condenado por usar su influencia política para favorecer a empresarios afines y cobrar comisiones ilegales en el caso ITV.

En su auto, la juez sostiene que no se puede obviar que en el caso de Oriol Pujol, el único hijo del expresidente catalán Jordi Pujol que se dedicó a la política, concurren "circunstancias positivas", como que no tenía antecedentes, que reconoció los hechos, su bajo riesgo de reincidencia y que cuenta con un "diagnóstico social positivo", así como su "integración sociofamiliar".

 Es más, la juez apunta que, aunque estas circunstancias no fueron en su día valoradas de "entidad suficiente" para confirmar el tercer grado que le aplicó la Generalitat, y que la propia magistrada revocó, sí que pueden ser tenidas en consideración a los efectos de aplicarle otros mecanismos legales "que favorezcan la continuación del proceso de inserción social, familiar y laboral iniciado por el penado". 

Cuando la juez revocó el tercer grado, Oriol Pujol aún no había finalizado el programa de Moral y Valores, al que se incorporó de forma voluntaria en prisión. Sin embargo, resalta la juez, en estos momentos Oriol Pujol ya ha concluido el programa "habiendo logrado el penado los objetivos marcados en el mismo de forma plenamente satisfactoria, mostrando un alto grado de arrepentimiento y reprobación ante el hecho delictivo, así como responsabilizándose del mismo".  Otro de los motivos que la juez expone para aprobar la decisiónde la Generalitat es que  durante la aplicación del tercer grado -hasta que fue revocado- y del artículo 100.2 se ha realizado un seguimiento de las actividades laborales y de voluntariado de Oriol Pujol, en las que ha cumplido los horarios, la normativa institucional y los objetivos de su plan de tratamiento.

Oriol Pujol, condenado a dos años y medio de cárcel por cohecho, falsedad documental y tráfico de influencias por el caso ITV, ingresó en prisión el 17 de enero pasado y 57 días después obtuvo de la Generalitat el tercer grado, que acabó siendo revocado, aunque a la semana siguiente la administración le aplicó el artículo 100.2 del régimen penitenciario, que ahora cuenta con la aprobación de la justicia.