El enfrentamiento mantenido entre integrantes de un CDR y un restaurador de Blanes por la presencia en el exterior de su establecimiento de lazos amarillos ha derivado en la citación de tres activistas ante la Guardia Civil, mientras sus compañeros les respaldaban a las puertas de la comandancia.

El propietario del local presentó denuncia a raíz de esa disputa del pasado 29 de agosto, por la que se ha abierto una investigación por los delitos de incitación al odio, injurias y desórdenes públicos.

El denunciante sostiene que le intimidaron por negarse a la presencia de lazos a las puertas de su local y los tres activistas que han acudido hoy a la comandancia de la Guardia Civil de Girona se han acogido a su derecho a no declarar.

En el exterior, y ante un despliegue de los Mossos d'Esquadra, las personas que han acudido a la convocatoria de los CDR han exhibido una pancarta con el lema "Cuando la injusticia es ley, la desobediencia es un deber".

La abogada de los activistas, Montserrat Vinyets, ha explicado a la salida de la comandancia que les han citado por la denuncia del propietario del restaurante que mantiene que le insultaron e increparon por retirar lazos amarillos y que intentaron entrar en su negocio.

Vinyets considera que esos hechos "deberán probarse" y considera que la versión del denunciante "no se corresponde con lo que pasó" en realidad.

"Se estaban colgando unos lazos en la vía pública, pero en el marco del ejercicio de participación política y el derecho a la libertad de expresión", asegura la letrada.

Montserrat Vinyets entiende que los hechos se han calificado "de forma muy atrevida" de desórdenes públicos, delito de odio e injurias y ha explicado que se han acogido al derecho a no declarar "a la espera de analizar bien el contenido del atestado y de la denuncia".

Las tres personas que han declarado esperarán a que el caso se traslade a los juzgados de Blanes para decidir su estrategia de defensa y no descartan querellarse contra el dueño del restaurante.