Este lunes se produjo un cambio de tendencia en la evolución interna de los contagiados por coronavirus en España. Si hasta entonces la Comunidad Autónoma que desde el principio había liderado el avance de la enfermedad era Madrid, el día 23 fue Cataluña quien pasó a tener el ritmo de propagación más alto.

Aquel día los casos en Madrid aumentaron en 873, por los 1.221 de Cataluña. La tendencia se vio corroborada el martes, cuando el número de nuevos contagiados fue de 1.777 en la capital por los 1.939 de Cataluña.

Si bien es cierto que este miércoles Madrid ha vuelto a ponerse por delante de Cataluña, no ha sido por mucho: 2.245 por 2.073 casos respectivamente. En cualquier caso, los datos de los últimos días indican una crecida considerable en el número de casos registrados en la comunidad con capital en Barcelona y, lo que es más importante, en el ritmo de expansión del patógeno.

Existe un dato demoledor al respecto: este pasado sábado, Cataluña contaba 4.203 casos. Para la noche del miércoles ya rozaban los 10.000 (9.937), lo que supone un incremento del 136% en solo cuatro días.

En cuanto al número de muertos, Cataluña sufrió casi el doble de muertes el martes (177) que el día anterior (94) y el miércoles sumó otros 156 decesos.

Proyecciones de hasta 13.000 muertos

Pero los datos más graves son tal vez los que refleja un informe del departamento de Salud de la Generalitat, que hace dos estimaciones sobre el desarrollo de la enfermedad en la región. La más optimista habla de que el pico de contagiados llegará el 24 de abril con 70.000 infectados y 7.600 muertes, mientras que el más pesimista anuncia esta punta el 28 de abril con 121.000 enfermos y unos 13.000 fallecidos.

Según Salud, a favor de la opción más optimista jugaría el hecho de haber puesto en marcha las medidas de confinamiento diez días antes que en Italia, lo que tendría un efecto positivo en la evolución de la denominada "curva" de casos.

Fuentes del departamento de Salud han explicado que estas predicciones se plantean para preparar al sistema "por si acaso", pero que el más pesimista "es un escenario de máximos".

Se da la circunstancia de que el propio presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha alertado este miércoles de que "a finales de abril" puede llegarse al pico de contagios por coronavirus en Cataluña y que la estabilización a la baja de la curva puede retrasarse hasta junio si no se toman ya medidas más drásticas, como el "confinamiento total".

Además, los pacientes con coronavirus ya ocupan un 76% de las camas de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales catalanes, según el informe, aunque en algunos centros ese porcentaje supera el 90% y en otros incluso el 100%, como el hospital Sant Pau i Santa Tecla, de Tarragona.

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El confinamiento ha servido, según el informe interno de la Generalitat, para disminuir las visitas a urgencias en un 50%, y también se ha reducido el uso de los centros de atención primaria, pasando de las más de 113.000 visitas el día 9 de marzo (el lunes antes del confinamiento) a las 48.400 el día 23 (también lunes, ya en la segunda semana de confinamiento).

El documento señala que estas predicciones están condicionadas por la evolución de los próximos días de la pandemia en Cataluña.