La amenaza de la gripe en otoño e invierno siempre causa gran preocupación entre las personas con unas defensas débiles. Este año, la preocupación es doble, debido a la confirmación de que es posible contraer la covid-19 y la gripe al mismo tiempo, lo que podría ser catastrófico para el sistema inmunológico.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades destacan que ambas enfermedades atacan las vías respiratorias y una infección grave de estas puede derivar en una neumonía, líquido en los pulmones o insuficiencias respiratorias. El doctor Michael Matthay, profesor de medicina y especialista en cuidados críticos de la Universidad de Florida, afirma que si una persona enferma tanto de covid-19 como de gripe, “aumenta el riesgo de efectos a largo plazo” en los órganos afectados por el virus.

La convivencia de ambos virus, el debilitamiento de la inmunidad generado por las vacunas y la relajación de las restricciones preocupa a médicos y expertos sanitarios. En este contexto, la epidemióloga Seema Yasmin advierte de que no solo es posible enfermar de ambos virus, sino que contraer uno puede debilitar el sistema inmunológico y facilitar la entrada de la otra enfermedad. “Una vez que te contagias de gripe y algunos otros virus respiratorios, eso debilita su cuerpo”, asegura Seema Yasmin. Por este motivo, la vacuna tanto de la covid-19 como la de la gripe puede ser especialmente importante para la inmunización de aquellos individuos de riesgo.

¿Cómo diferenciar la covid-19 de la gripe?

La transmisión de estas dos patologías se produce por contacto cercano con una persona contagiada. Las partículas respiratorias o aerosoles que se expulsan al respirar, hablar, toser o estornudar pueden llegar al otro individuo y que se produzca el nuevo contagio.

Es difícil diferenciar ambas enfermedades debido a que causan síntomas similares: fiebre, tos, dificultad para respirar, fatiga, dolor de garganta, dolores corporales y secreción o congestión nasal. Sin embargo, la covid-19 pueda causar pérdida del gusto y olfato, por lo que es importante extremar la vigilancia en estos síntomas.

A pesar de esta diferencia, los expertos recomiendan la realización de una prueba de detección de covid-19, ya que gran parte de los contagios de coronavirus se producen de forma asintomática. Además, los profesionales sanitarios aconsejan ponerse en contacto por teléfono con el centro médico ante cualquier duda o sospecha en este aspecto para realizar las pruebas necesarias.

Doble protección de la mascarilla

Para evitar el contagio de una o ambas enfermedades, los expertos recomiendan el uso de mascarilla en situaciones susceptibles de poder contraer la enfermedad, ya que sirve para proteger tanto de la covid-19 como de la gripe.

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En relación a esto, la relajación de las medidas podría generar “una tormenta perfecta de actividad acelerada del covid-19, a medida que la gente se reúne más, en espacios interiores, especialmente”, afirma la doctora Jeanne Marrazzo, directora de la División de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Alabama en Birmingham.

El resfriado podría ser un aliado para combatir la covid-19

Estudios revelan que el comportamiento de algunos virus al llegar a un cuerpo es el de competir para causar su enfermedad. Una investigación realizada en Reino Unido a principios de año expuso que el rinovirus o resfriado común tiene predominio sobre la covid-19, por lo que podría ayudar a expulsar el coronavirus del organismo.

De esta manera, al contrario que con la gripe que se favorece la convivencia de ambos virus por el debilitamiento inmunológico, el resfriado podría frenar el contagio de la covid-19. En los estudios, cuando se liberó el rinovirus 24 horas antes o después del contagio de covid-19, el resfriado común inhibió al coronavirus. Sin embargo, se podría producir un contagio posterior de SARS-CoV-2. Pese a esto, la falta de estudios en esta línea hace que se desconozca cómo va a impactar en este otoño e invierno.