La directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), María Jesús Lamas ha abogado por tener "prudencia" frente a la vacuna de la farmacéutica Pfizer contra la COVID-19, aunque ha opinado que "es esperanzadora" porque el resultado final de los ensayos, con seguridad, estará muy por encima de "lo que se espera para una vacuna exitosa".

Lo ha afirmado en una jornadas sobre vacunas y coronavirus que ha organizado la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS), en la que ha dicho que, pese a los resultados de eficacia del 90%, es necesario esperar a que finalicen los ensayos clínicos porque faltan otros intermedios.

En este sentido, Lamas ha considerado que los datos preliminares son esperanzadores aunque habrá variaciones, y es posible, ha vaticinado, que el resultado final se mantenga por encima de lo esperado frente a otras vacunas.

Sobre las campañas de vacunación cuando se comercialice la primera, ha afirmado que habrá poca reticencia frente porque los ciudadanos están concienciada sobre la función de las vacunas frente a graves enfermedades y ha apelado a las campañas de divulgación sobre la seguridad de los procesos y ensayos clínicos para su aprobación ya que se llevan a cabo bajo "una escrupulosa evaluación".

Lamas ha considerado que la reticencias o críticas actuales frente a la vacunación en determinados sectores obedece a que "la gente ha recibido demasiada información" y un cambios de criterios frente a la pandemia y eso "genera escepticismo".

En este sentido, ha recalcado que el porcentaje de reticencia será bajo y ha puesto como ejemplo que los ciudadanos han seguido las recomendaciones con la vacunación de la gripe, que se ha incrementado en un 30 por ciento respecto a años anteriores.

La directora de la AEMPS ha destacado que "la prisa" por encontrar una vacuna frente a la COVID-19 no afectará "en absoluto al rigor y método de evaluación" de las vacunas y ha defendido la labor que realizará la AEMPS en el futuro cuando se comercialicen las distintas vacunas contra la COVID-19, como hace con todos los medicamentos.

Ha insistido en que que si bien "la ciencia no es infalible" y "faltan muchos estudios por completar", los procesos para comercializar una vacuna cumplen unos requisitos y protocolos rigurosos.

Sobre una hipotética obligatoriedad de vacunarse contra la COVID-19 en determinados colectivos o para llevar a cabo determinadas actividades, Lamas ha indicado que "no parece una cosa fácilmente aceptable", pero ha precisado que algunos países podrían exigirlo para entrar o para desempeñar determinadas profesiones.

Sin embargo, sí ha abogado por la creación de un registro de vacunación porque va a ser "muy necesario para la vigilancia epidemiológica".