Los datos económicos llegados desde Asia no han hecho más que acentuar estas preocupaciones. La inflación de China está experimentado una fuerte aceleración en los últimos meses, mientras que los pedidos de maquinaria en Japón muestran un importante deterioro. Malos indicadores que muchos ligan a los negativos efectos que empieza a tener la guerra comercial, que de momento solo parece beneficiar a Estados Unidos.

La economía norteamericana ha vuelto a mostrar una vez más la fortaleza de su mercado laboral sin sufrir de momento grandes presiones inflacionistas, la principal preocupación de la Reserva Federal en la actualidad. El índice de precios industriales publicado hoy, correspondiente al mes de julio, ha subido apenas una décima de punto por debajo de lo  previsto  por el consenso del mercado.

Una solidez que se está reflejando en sus mercados financieros, donde el S&P 500 se mueve otra vez en zona de máximos absolutos.

EI Ibex 35, entre tanto, sigue sin levantar cabeza con una desesperante atonía general. El selectivo  ha cerrado la sesión de hoy con una mínima ganancia del 0,08 por ciento para quedar en los 9.754 puntos. Al menos, el soporte de los 9.700 puntos está aguantando de momento.

Los bancos han vuelto a ser los malos de la película. Esta vez liderados por las caídas del 0,9 por ciento del BBVA, solo superadas por las pérdidas del 2 por ciento  del grupo DIA, que sigue purgando los excesos de las subidas del  viernes pasado al calor de la rumorología veraniega, y del 1 por ciento de Técnicas Reunidas.

 Entre los  valores en positivo ha vuelto a destacar Siemens Gamesa. La compañía de aerogeneradores ha experimentado un alza del  2 por ciento tras publicar la firma de un contrato para el suministro de componentes a una central eólica marina en Estados Unidos. También ha brillado Inditex con un avance del 1,85 por ciento que viene a romper la dinámica negativa del  valor en las últimas semanas.

Fuera del selectivo la atención se ha centrado en el grupo minero Berkeley, que ha experimentado un espectacular rebote del 50 por ciento después del ajuste sufrido  ayer en las mismas proporciones.

En los demás mercados también ha imperado la tranquilidad. El cambio del euro ha dado un pequeño paso atrás al caer por debajo del nivel de 1,16 dólares, mientras que el precio del crudo Brent ha repuntado levemente sobre los 72,5 dólares por barril con los inventarios de Estados Unidos en su nivel más bajo de los últimos siete meses.