En estas últimas semanas hemos conocido que el juez ha imputado a Unidas Podemos por una supuesta caja B. Las pruebas las ha aportado el abogado purgado de Unidas Podemos, José Manuel Calvente, quien fue expulsado del partido de forma precipitada acusado de una agresión sexual a una de las asesoras de Iglesias, Marta Flor.

En palabras de Calvente, él junto a otra compañera decidieron denunciar las irregularidades que ellos veían en el partido y la formación, como respuesta a sus ataques, lo cual vertió graves acusaciones de la cúpula hacia ellos, como la supuesta agresión sexual de Calvente. Meses después, hace ahora unas semanas, el juez ha decidido no seguir con esta investigación, ya que considera que no hay caso y por tanto, la denuncia emprendida por Podemos hacia Calvente por una supuesta agresión sexual ha quedado en nada.

Pero Calvente sí que ha aportado pruebas al juez donde denuncia las pruebas que ya denunció delante de la cúpula nacional. Algo que el juez ha visto oportuno seguir investigando y por ello ha imputado a altos cargos de la formación morada.

Sin embargo, para Pablo Iglesias estas son acusaciones que no van a ir a ninguna parte y han querido quitarle credibilidad en todo momento, aunque los testimonios de 2018 le recuerdan que fue él quien motivó en una rueda de prensa a denunciar posibles actos ilícitos que tuviesen como beneficiario a su formación.

En este sentido, lo que la formación ha dejado claro es que existe una vara de medir diferente. Sus propias declaraciones hace unos cuantos años dejan entrever que ellos pedían responsabilidades políticas cuando eran otros los partidos que estaban siendo investigados, saltándose así la presunción de inocencia que piden ahora.

En este sentido, ha querido entrar a valorar estas informaciones el periodista de ABC, Javier Chicote, en 'El Cascabel'. En la entrevista ha detallado las pruebas que ha presentado José Manuel Calvente, donde la obra de la sede de Unidas Podemos ya estaba adjudicada antes de su licitación.

Para ello, ha explicado el periodista, que el hasta ahora abogado de Podemos ha incluido mensajes de adjudicación de las obras, lo que a su parecer hace son "pruebas bastante llamativas" que dejan entrever que "no fue una licitación limpia".

En este sentido, el periodista ha explicado que aunque Unidas Podemos no sea una empresa subvencionada es una formación que maneja dinero público y por ello "estas obras que tienen que conseguir a concurso público", algo que según ha explicado, no se hizo.

Por ello, el comunicador ha dicho que estas informaciones "huelen que apestan" y cree que va a tener un largo recorrido judicial, aunque ha defendido la presunción de inocencia, algo que los dirigentes de Unidas Podemos no hacen cuando el perjudicado es otro partido político.