Fallece Víctor Maroño, vicario general de la Archidiócesis de Santiago: "Excelente consejero y hombre fiel"
El funeral por el presbítero tendrá lugar este 23 de agosto en la catedral compostelana, para después ser enterrado en el claustro de la basílica
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El pasado domingo, 22 de agosto, se anunció la muerte de Víctor Maroño, sacerdote y vicario general de la Archidiocesis de Santiago.
El arzobispo de Santiago, Mons. Julián Barrio, fue quien dio la noticia a través de las redes sociales: "Con dolor comunico la muerte de nuestro querido Vicario General D. Víctor Maroño". En su publicación, Mons. Barrio destacó la labor y entrega del presbítero a lo largo de su etapa en el cargo diocesano: "Excelente consejero, gran colaborador, memoria de la Diócesis y hombre fiel".
Por último, pidió a los fieles de Santiago que ofrecieran sus oraciones por el fallecido, encomendándolo "a la bondad de Dios con la intercesión de María y el patrocinio de Santiago".
Con dolor comunico la muerte de nuestro querido Vicario General D. Victor Maroño, excelente consejero, gran colaborador, memoria de la Diócesis y hombre fiel. Con profundo agradecimiento, encomendémoslo a la bondad de Dios con la intercesión de María y el patrocinio de Santiago.
— Arzobispo Compostela (@arzobispjbarrio) August 22, 2021
El funeral del P. Maroño tendrá lugar este 23 de agosto a las cinco de la tarde en la catedral de Santiago, para ser enterrado después en el claustro de la basílica. Además, se celebrarán Misas en la catedral, según la costumbre del Cabildo Metropolitano, los días 26 y 31 de agosto y el 23 de septiembre.
Víctor Maroño, una vida al servicio de la Iglesia en Santiago
El P. Víctor Maroño nació en Calvente (Coruña) en 1935. Licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontificia de Salamanca tras su ordenación sacerdotal en 1959, fue nombrado ecónomo de diferentes parroquias.
En 1962, fue designado párroco de Santa María de Restande y, dos años después, teniente arcipreste de Berreo de Abaixo. También fue párroco de Angeriz y Órdenes, además de trabajar como encargado de Entrecruces. Además, desempeñó funciones como arcipreste de Bergantiños.
Aparte de su labor pastoral, también desarrolló un perfil docente en el Instituto de Carballo, donde fue enviado como profesor en 1975.
En 1982 impulsó la creación del Fondo Común Diocesano de Bienes, gestionándolo entre 1983 y 1985. En 1984 fue nombrado vicario episcopal de Santiago y, en 1996, pro-vicario general. Desde 2003, el P. Maroño era canónigo de la catedral de Santiago, desempeñándose como vicario general y moderador de la Curia diocesana.
En 2014, el P. Maroño recibió el título honorífico de Capellán de Su Santidad, concedido por la Santa Sede en reconocimiento a su esfuerzo y dedicación al servicio de la diócesis.
