Vincenzo Paglia: "Necesitamos una revolución económica y cultural para una sanidad que sea justa para todos"

El presidente de la Academia Pontificia para la Vida ha abierto el segundo día de trabajo del Congreso Internacional de la organización médica "SOMOS Community Care" en Madrid

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Monseñor Vincenzo Paglia, presidente de la Academia Pontificia para la Vida, ha abierto el segundo día de trabajo del Congreso Internacional de la organización médica "SOMOS Community Care", en Madrid, este jueves, 6 de octubre. El prelado italiano conoce muy de cerca la realidad de "SOMOS Community Care" que visitó en Brooklyn, en Nueva York, en marzo de este año.

Paglia abordó el tema, “Equidad en Salud y Bienestar. Sanar y transformar el sistema para brindar un único estándar de atención”, y explicó que la pandemia de la covid-19 “nos ha enfrentado a problemas complejos, relacionados a la relación médico-paciente, la equidad en el acceso a la atención sanitaria, la asignación de recursos económicos en el tema de la salud”.



Durante el encuentro con los periodistas, Paglia señaló que “impulsar una carta que podría subrayar la importancia de los médicos de familia para preservar la riqueza y la fuerza de la relación primaria, puede ser la medicina más importante […] la vacuna más importante es la afección, es el amor en un mundo individualista, es la fraternidad en un mundo de abandono. Programar una carta en esta perspectiva puede ser un buen fruto de este simposio”.

“Sin duda necesitamos una revolución política, social, económica y cultural para una sanidad que sea justa para todos, porque hoy se dan unas injusticias sanitarias terribles […] es necesario un cambio, una verdadera revolución cultural”, ha subrayado Paglia. En cualquier caso, ha subrayado Paglia, “no debemos abandonar nunca al enfermo, ni siquiera cuando no haya más tratamientos disponibles: los cuidados paliativos, el tratamiento del dolor y el acompañamiento son una necesidad que nunca debe desatenderse”.



El arzobispo italiano ha recordado lo que vivió su país durante los primeros meses de la pandemia cuando en Italia murieron muchísimos ancianos: “Yo pedí un encuentro con el Ministro de la Sanidad diciéndole que era necesario crear una comisión para reflexionar sobre esta nueva situación que estábamos viviendo por primera vez en la historia […] hoy hay un nuevo pueblo en el mundo: el de los ancianos que son millones. Este pueblo no tiene a nadie que reflexione sobre ellos”.

"Los más ancianos fueron las principales víctimas. La pandemia puso de manifiesto las contradicciones de nuestra sociedad", dijo el arzobispo italiano.

Al comienzo de la pandemia, señaló Mons. Paglia, "el enfoque en la atención hospitalaria, sin embargo, ha desviado la atención de otras instituciones sanitarias. Las residencias de ancianos, por ejemplo, se vieron muy afectados por la pandemia, y los equipos de protección personal y los test contra la covid-19 solo estuvieron disponibles en cantidades suficientes después de mucho tiempo".



Cuando se creó esta Comisión, el ministro puso a Monseñor Paglia como coordinador: “Había algún técnico, pero faltaba una visión global. Hemos trabajado y escrito una carta de los derechos de los ancianos y el gobierno la aceptó. En el último Consejo de Ministros de este gobierno será aprobada la nueva política para los ancianos”.

Paglia ha recordado además las últimas catequesis del Papa sobre la vejez: “Ojalá sean conocidas por todo el mundo […] hay una relación extraordinaria entre los nietos y los abuelos. Dos generaciones que nos muestran la necesidad de la ayuda. ¿Puede vivir un niño sin la ayuda de los padres? ¿Pueden vivir los ancianos sin la ayuda de los jóvenes? No. Ellos nos enseñan a todas las generaciones que la única posibilidad de vivir, es vivir juntos”.



El arzobispo italiano ha admitido que es “curioso que un obispo ayude a un Gobierno, pero es así, y el acto de aprobar este cambio de políticas es muy importante, es un signo de una nueva visión de la sociedad por un futuro más humano, lleno de fraternidad, solidaridad, en el que caben todos, creyentes y no creyentes, especialistas, técnicos y voluntarios”.

Tras las palabras del presidente de la Academia Pontificia para la Vida, también hubo tiempo para escuchar a Mario Paredes, director ejecutivo de “Somos”, que trabajó con la Conferencia de obispos de Estados Unidos. “SOMOS es una organización creada en Nueva York para asistir, atender y acompañar a los pacientes de más escasos recursos en los barrios de la gran ciudad americana. La misión de “SOMOS”, según su director ejecutivo, es “escuchar, atender y darle seguimiento a una persona que tiene problemas de salud”.

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