Cáritas Madrid cuenta con una nueva casa familiar para dar un techo a mujeres con hijos: "Hay saturación"

La Casa Familiar Santa Zita se une a otros cuatro espacios que dan un techo a familias sin recursos. La responsable del proyecto, Pilar Cortés, ha ofrecido más detalles en ECCLESIA

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Cáritas Madrid cuenta con una quinta casa familiar para proporcionar un techo a familias con dificultades económicas. Se trata de Santa Zita, el nuevo espacio ubicado en la calle Palma del Río 3 que ha bendecido este jueves, 15 de diciembre, el vicario episcopal de la Vicaría I, Juan Carlos Vera.

A diferencia de las otras cuatro casas familiares con las que dispone la entidad de la Iglesia desde 2019, Santa Zita ofrece un hogar a madres con hijos menores a su cargo, tal y como ha explicado la responsable de este ámbito de Cáritas Madrid. Pilar Cortés, en declaraciones a ECCLESIA.

“Es un proyecto pensado para mamás con niños menores de edad, con dificultades de inserción laboral, de formación, económicas y sobre todo que carecen de vivienda y de apoyo familiar y social”, ha subrayado.

Inmigrantes y con falta de formación

De esta manera, la Casa Familiar Santa Zita ofrece alojamiento temporal a estas madres durante un periodo de tiempo. El edificio dispone de un total de doce habitaciones con capacidad para acoger a un total de 39 personas: “Además de la habitación para las madres con los hijos, están las salas comunes como el comedor, la cocina, la sala de juegos, los lavaderos... Lo que pretendemos es que aprendan a vivir en comunidad, a compartir, a hablar de las dificultades que tienen. Si conseguimos que dos mamás con sus hijos que estén trabajando y tengan ingresos puedan alquilar una casa o piso entre las dos para ayudarse mutuamente con el cuidado de los niños, sería todo un éxito”, ha relatado Cortés.

Para alcanzar la inserción laboral de estas mujeres, la mayoría de ellas inmigrantes, muchas se valen de los programas de empleo de Cáritas Madrid, donde reciben formación y orientación.

Como hemos comentado, Cáritas Madrid cuenta con otras cuatro casas familiares en su ámbito de actuación, todas ellas cedidas por congregaciones religiosas femeninas o párrocos que ceden parte del edificio a este fin. Viviendas que surgieron antes de la pandemia ante el boom migratorio de aquellos años.

“Llegaban a Madrid procedentes de Venezuela, Colombia, Perú, Siria... y se encuentran con que no tienen alojamiento porque el servicio social está saturado y el de otras asociaciones. Se da así una respuesta de Iglesia ante esta saturación”, ha precisado Pilar Cortés.

"El problema que tenemos es la saturación de familias a las que atendemos"

Preguntada si la actual inflación y la crisis energética está haciendo que aumenten las peticiones de asilo, la responsable de Casas Familiares de Cáritas Madrid asegura que comienza a haber saturación.

“Los centros residenciales están saturados, llenos de familias. Aunque tengan ingresos muchos de ellos, hacer frente a un alquiler a precio de mercado es imposible. Echan solicitudes de vivienda pública pero tampoco hay oferta. Se da cabida a estas familias, pero llega un momento en el que se saturan los centros residenciales. Con las casa familiares de Cáritas nos ocurre lo mismo. El problema que tenemos es la saturación de familias que atendemos que no tienen donde ir por no poder pagar un piso”, ha advertido en ECCLESIA.

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