“A invierno lluvioso, verano caluroso”, dice el refrán. Algo que este año no se ha cumplido, dado que el verano ya ha hecho su presencia en este mes de abril y el invierno ha sido cálido y húmedo.

El invierno meteorológico, que concluyó el pasado 28 de febrero, ha sido catalogado por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) de cálido. La temperatura media en la España peninsular fue de 7,4º, 0,8º por encima de la media de la estación, al igual que las mínimas, 0,7º más, lo que lo convierten en el décimo invierno más cálido desde el comienzo de la serie de referencia que arranca en 1961, y en el quinto más cálido seguido desde los registros.

El pasado 20 de marzo se daba por inaugurada la primavera, un día en el que las temperaturas máximas ascendían, como en el caso de Sevilla y Badajoz, donde se superaron los 25 grados o Valencia y Toledo, que superaron los 20. Temperaturas que se han ido manteniendo, así como subiendo, durante lo que llevamos de primavera. Con estas temperaturas tan altas solo en el mes de abril y pensando en la idea de que el verano está a la vuelta de la esquina, la sensación es la misma y en 'Poniendo las Calles' nos preguntamos que nos espera para los meses de junio, julio y agosto.

La primavera se preveía con temperaturas en torno al promedio normal para esta época del año o más cálidas de lo normal. En palabras del portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, se prevé una primavera cálida, sobre todo en los archipiélagos y en el este peninsular, tras un invierno sin ninguna ola de frío, en el que no habrá lluvias. Y es que son cada vez más las zonas de España en las que lleva sin caer una gota desde hace más de 100 días.

De hecho, de seguir el tiempo como está, este mes podría cerrarse como uno de los más calurososo y secos de la historia, desde que se tienen datos. El famoso refrán "en abril, aguas mil", parece que no se va a cumplir este año. "Parecía que la última semana de abril podríamos tener algunos restos de una borrasca que entraría por el suroeste, Andalucía y Extremadura, pero los últimos modelos la están diluyendo", explica Olcina en el Fin de Semana, dando esperanzas a las distintas ferias que se celebran en estas fechas, como la Feria de Sevilla, que comienza este fin de semana.

En resumen, 2023 ha comenzado siendo un año seco con altas temperaturas, donde las lluvias, por encima del promedio normal para estas fechas, no fueron suficientes para aliviar las reservas de los embalses. Incluso si se llegara a cumplir la previsión de lluvias normales para este año, tampoco sería suficiente para compensar el registro de lluvias durante los últimos 12 meses. Solo en los primeros cuatro meses del año.

¿Qué se espera para el verano?

“Aumento de la frecuencia e intensidad de las olas de calor. Temperaturas anormalmente altas desde el comienzo de la primavera. Los meses correspondientes al verano climatologico, nos traerían un ambiente mucho más cálido de lo normal en todo el país. Anomalías termícas positivas por encima de la media, un verano realmente caluroso.”, aclara.

Un verano seco y realmente muy cálido, que meteorológicamente comienza el próximo 1 de junio, y astronómicamente el 21 de junio y para el que España se prepara, ante un verano abrasador, con más calor de lo normal.