Hace ya 15 días que se perdió el rastro de Esther López, de 35 años, en la localidad de Traspinedo, en Valladolid. Desapareció el 12 de enero. Esa noche acudió a un bar junto a varios amigos para ver un partido de fútbol. Después se subió a un coche de un amigo, del que terminó bajándose a mitad de camino; y desde entonces no se sabe nada de ella.

En Mediodía COPE, Miguel López, el padre de Esther la joven desaparecida, ha contado que la familia no puede más, están cada vez peor y la situación es inaguantable.

También ha querido explicar porque tardaron varios días en poner la denuncia, del viernes al lunes. Llegaron a pensar que su hija estaba de fiesta y que se le podría haber roto el móvil.

Miguel y su mujer pasan las horas dentro de casa, sin salir a la calle y esperando noticias de la Guardia Civil. Confían plenamente en su trabajo. Saben de primera mano que ya han terminado de rastrear la casa del único sospechoso de la desaparición de Esther, de Ramón “El Manitas”. Y tras buscar en la casa, ahora se van a centrar en el coche.

Agradecen de corazón a toda la gente que participa en las batidas de búsqueda de su hija. Aunque reconocen que en quien confía realmente para que puedan encontrar a Esther es en la Guardia Civil, dicen que son los únicos que pueden acceder a los lugares mas inaccesibles, como los pozos.

Todo el pueblo de Traspinedo se ha volcado en la búsqueda. Hay preocupación e incertidumbre, porque encima mañana cabe la posibilidad de que suelten a Ramón “El Manitas”.