Ahora te quiero contar una historia. La protagonista es una chica Argentina de 20 años. Es estudiante de Periodismo. A los 13 años cayó en las redes de un ciber acosador: “Creía que tenía confianza con él”

Nos ha pedido que no utilicemos su nombre porque la denuncia aún está en marcha. Estuvo seis años siendo acosada por este hombre: “Cuando me quise dar cuenta, estaba atrapada”

Se aprovechaba de su debilidad psicológica para pedirle todo tipo de cosas

Y lo más duro de todo esto es que, este es solo uno de los miles y miles de casos que están ahora mismo encima de la mesa de la Fiscalía del Tribunal Supremo. Y es que, el confinamiento duro de marzo, abril y mayo generó condiciones óptimas para los delincuentes sexuales que operan en la red; sobre todo contra los menores. Como te decía, estos casos han aumentado en más de mil por cien.

La Policía Nacional también ha detectado este aumento de casos. Se ha registrado un incremento del 350% con respecto al año pasado.

Pero hay más datos. Atento:

• Del total de los delitos que se cometen en Internet, el 8,5% tienen por víctimas a menores de edad. Este tipo de delitos se incrementaron más de un 18% en 2020.
• En un comunicado hecho público por la Comisión Europea se desvela que mientras que en 2010 se recibían unas 25.000 denuncias por abusos a menores en Europa, en el año 2019 se superaron las 700.000.

Pero... ¿Cuáles son los casos más habituales de delincuencia que afectan a los menores de edad? Son insultos, amenazas y burlas.

Otra práctica que por desgracia se ha normalizado es la del sexting, que involucra a dos menores de edad que, por lo general, son pareja o han sido pareja.

Durante la etapa de noviazgo han intercambiado contenido sexual y, cuando la relación acaba mal, uno de los dos difunde imágenes y vídeos a través de internet o por grupos de Whatsapp.

Otro que se está extendiendo y, sin duda es el que más preocupa, es el grooming. Esto es el acoso por parte de un adulto a un menor con intenciones sexuales, generalmente mediante el uso de perfiles falsos.

Fíjate que casi el 50% de este tipo de delitos son realizados por personas que no conocen de nada a sus víctimas. La edad media de los que sufren grooming es de 15 años.

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El grooming, por cierto, está tipificado en el código penal, con penas de hasta 3 años de prisión por contactar con menores de 16 años con intenciones sexuales o relacionadas con la pornografía infantil.

Un documento hecho público por la fiscalía revela que los delitos por grooming en menores crecieron un 55% en 2020 con respecto a 2019 y un 175% con respecto a 2018.

Para poder atajar el problema, lo más importante es detectarlo... Muchas veces los niños se sienten intimidados o sienten vergüenza. No tienen la confianza suficiente para decir que tienen este problema. Diana Díaz es la directora del Teléfono y Chat de la Fundación ANAR y nos da en COPE algunas pistas para detectar estos casos.

Una vez sepamos que esto se está produciendo hay que acompañar al menor. Es un momento de su vida que se sentirá muy solo, abandonado. Por eso, los padres tienen que estar más cerca que nunca.

Como te decía, estos casos de ciberdelincuencia han crecido durante la pandemia y, el principal motivo es porque no somos conscientes de lo peligroso que puede ser hoy en día cualquier teléfono móvil con conexión a internet.

Todo para evitar casos como el que te contaba al principio. Niñas, niños, de 10, 11 o 12 años obligados a hacer cosas que no quieren porque una persona oculta a través de la red les está manipulando.