Los viajes de Prevost a China

El cardenal de Hong Kong, el jesuita Stephen Chow, ha revelado que, tras su elección, el Papa León XIV le contó que ha visitado China más de una vez, y conoce su realidad y su cultura. Estamos, pues, ante el primer Papa de la historia que ha pisado suelo de la China continental. En los sitios WEB de la Orden agustina no aparece información sobre las visitas que su Prior General, Robert Prevost, pudo realizar entre los años 2001 y 2013, lo cual se comprende por la situación de inseguridad que han vivido (y todavía viven) las comunidades católicas en China.

Lo que sí documenta la historia es el vínculo de los agustinos con China, que nunca ha desaparecido completamente. De hecho, en la región de Hunan sigue existiendo una presencia de estos religiosos, dependiente de la Provincia agustina de las Filipinas. No cuento todo esto como mera curiosidad. China es uno de los espacios para la misión de la Iglesia en el siglo XXI, lo vieron claramente Benedicto XVI y Francisco.

La reacción del régimen chino a la elección de León XIV ha tenido un perfil bajo, casi frío, seguramente expectante. El hecho de que el Papa proceda de los Estados Unidos, el gran antagonista en el imaginario de los líderes chinos, ha debido provocar una especie de shock. Por otra parte, es una oportunidad para mostrar que el Papa es libre de las diversas estrategias de los poderes del mundo.

A este respecto, me impresiona el testimonio de un católico del interior de China que publica la agencia Asia News: el prejuicio general es que ser católico significa no ser plenamente chino, y eso implica una presión altísima; recibir el bautismo significa aceptar esa tensión de por vida, y sólo es posible si entiendes lo que significa pertenecer a la Iglesia universal, algo que permite florecer las propias raíces culturales chinas. Seguramente el Papa León conoce todo esto de primera mano, y eso le ayudará a proseguir con realismo, inteligencia y amor, el camino iniciado por sus predecesores.