Todo está por las nubes, nos damos cuentas cuando vamos al supermercado, a un restaurante, cuando hacemos una reserva hotelera y sabemos que a muchas familias les cuesta llegar a fin de mes. Eso sí, cuando llegan los meses de verano, no se perdonan las vacaciones y encontramos las playas y terrazas llenas. “Entiendo que es un periodo importante y tenemos una idea de experiencia de las vacaciones más fuerte que en otras épocas”, explica el escritor y columnista Daniel Gascón.

La inflación, la subida de tipos y los veranos postapandemia han obligado a las familias españolas ha de recurrir a sus ahorros y estos ha mermado su consumo y reducido sus expectativas de gastos, provocando que gran parte de las familias hayan acudido al banco a solicitar créditos al consumo para poder afrontar las vacaciones sin sobresaltos y disfrutarlas. “Lo que se pide es el cambio de escenario, estar en otro lugar”, defiende Gascón. Por un lado, los datos aportados por el Banco de España no apuntan esta referencia, pero realmente no es así.

Los créditos que han sido concedidos por los bancos a las familias españolas ha caído un 2% en junio respecto al mismo mes hace un año. Además, se consigue una racha de seis meses consecutivos a la baja. “Los préstamos al consumo aumentan en Navidad y en verano, pero este año ha sido una subida en el número de personas que deciden optar por la financiación para irse de vacaciones, esto es lo llamativo”, nos explica Patricia Suárez, presidenta de Asufín, Asociación de usuarios financieros.

Si se realiza una comparación mensual, el endeudamiento de las familias ha subido un 1,4% en el mes de junio, hay que intentar gestionar nuestras finanzas con la cabeza fría sin dejarnos llevar por el impulso y descartando lo que realmente necesitamos a lo que deseamos”, defiende Suárez.

El aumento en este tipo de crédito se debe, sin duda, al aumento de las necesidades de gasto de las familias, cuando llegar a tener que afrontar los gastos de las vacaciones y no tener los recursos suficientes, “esto se puede gestionar cogiendo un día más barato, menos días, hay que ajustarlo a lo que de verdad nos podemos permitir”.

Los créditos hipotecarios representan la mayor parte del total de la deuda, un 72%, y los préstamos de las familias destinados a otros fines, sumaron 95.460 millones de euros. Las empresas no han seguido el mismo camino y han continuado reduciendo su endeudamiento por debajo del dato de mayo. “Hay que tener en cuenta la TAE, que es el tipo de interés que vas a pagar y en el plazo, cuanto menos tiempo estemos pagando un crédito mucho mejor”. Con esta bajada, el crédito a las compañías suma su tercer mes a la baja tras la subida de marzo. Esta caída de la financiación empresarial se debe tanto al descenso de los créditos con las entidades financieras como a los valores representativos de deudas.