Laia Alegret fue muy precoz en descubrir cuál era su vocación. Desde muy pequeña supo que quería estudiar el origen y la evolución de la Tierra. Hoy es geóloga y catedrática de Paleontología en la Universidad de Zaragoza. En 2017 fue la única española en participar en una expedición para estudiar un nuevo continente llamado Zelandia. Está oculto bajo el mar en un 94% y se encuentra en el Pacífico Suroeste. Solo podemos ver sus montañas más altas, que son Nueva Zelanda y Nueva Caledonia, ya que el territorio se separó de Australia y la Antártida hace 80 millones de años.

Gracias al estudio de las muestras obtenidas en el fondo marino, Laia obtuvo la Beca Leonardo, otorgada por la Fundación BBVA. “Para mí, la obtención de la Beca Leonardo me supuso tener una financiación para poder realizar mi investigación”, indica Alegret, y concreta que “lo que hicimos fue perforar sondeos submarinos en 6 localizades por la mitad norte de Zelandia. Nos ha permitido reescribir la historia de un continente”.

Gracias a su investigación sabemos cómo evolucionó todo el continente tras separarse de Australia y la Antártida, cómo cambió la profundidad de sus mares y cómo condicionó las migraciones de las especies. Mediante el estudio de los fósiles del fondo marino, se han podido identificar también cambios climáticos del pasado.

“Lo que hemos descubierto es que en el pasado se produjeron eventos de calentamiento que podemos comparar con el actual cambio climático. Lo que nos enseña el estudio de las muertas de Zelandia es que en el pasado hubo eventos de calentamiento, pero no tan rápidos como los que estamos ocasionando los humanos”, concluye la paleontóloga.

Comparando estos eventos del pasado, se pueden mejorar sustancialmente los modelos de predicción de cara al futuro.

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