Nunca me ha gustado la antipolítica, la descalificación de brocha gorda a los partidos políticos. Gobernar es difícil, hacer oposición también. Pero tengo la impresión cada vez más intensa de que en esta pandemia, con lo duro que nos ha golpeado, la clase política está muy por debajo de la sociedad. Tenemos un Gobierno empeñado en justificarse y una oposición que no acaba de tener la solidez de hacer propuestas.

Hoy en el Congreso hemos vuelto a tener un ejercicio de tacticismo. Sánchez ha querido convertir la votación de la convalidación del estado de alarma en algo así como una cuestión de confianza. Antes de que comenzara el debate esta mañana a las 10 de la mañana, antes de que supiéramos que el PP se iba a abstener, Sánchez ya había obtenido el apoyo de 176 diputados, al llegar a un acuerdo con Ciudadanos, PNC y Coalición Canaria.

Sánchez, como ya es habitual, ha vuelto a no reconocer ningún error, sigue sacando pecho y habla en términos bélicos de una victoria parcial. Hablar de victoria parcial cuando Bélgica y España son los dos países con más muertos por 100 muertos, cuando España es el país con más sanitarios infectados... Sánchez, como Teresa Ribera este fin de semana, “España está en la gama alta de éxito”. Sánchez ha sacado pecho del apoyo conseguido hablando de que tiene por delante toda la legislatura.

¿Qué ha cedido Sánchez a cambio del voto de Ciudadanos y de PNV? El PNV le ha arrancado mayor protagonismo de las comunidades autónomas y, sobre todo, libertad para celebrar las elecciones que están aplazadas en el País Vasco. Ciudadanos poca cosa, Sánchez ha anunciado que por fin habrá luto oficial.

Pero Ciudadanos no ha conseguido que el Gobierno desvincule la duración del Estado de Alarma de la vigencia de los ERTES con lo que Sánchez seguirá utilizando ese arma de chantaje. La intervención de Arrimadas, que ha vuelto al hemiciclo, ha sido muy dura y la líder de Ciudadanos se ha empleado a fondo en dejar claro que no es el nuevo socio.

A ERC, a Rufián, que le ha sentado a cuerno quemado que Sánchez se haya apoyado en Ciudadanos. Rufián, de hecho ha recordado/amenazado con que queda mucha legislatura por delante.

¿Es verosímil este cambio de socios del que habla ERC? Es lo que nos hubiera gustado a todos antes de la repitición de las elecciones. Fue el error que cometió Rivera y que ha convertido a Ciudadanos de partido bisagra en mini partido. Mientras Iglesias esté en el Gobierno no hay cambio posible. Ciudadanos no es un recambio a Iglesias, ya nos gustaría. Siempre es mejor, mucho mejor el apoyo de Ciudadanos que el de Iglesias.

Casado ha vuelto a acusar Sánchez de mentir. Ha estado eficaz en señalar los errores del Gobierno, ha desmontado con eficacia el argumento de que no hay plan B y también la doble vara de medir. Pero a Casado le sigue faltando fuerza en plantear la alternativa. No se hace oposición solo con la crítica.