Jesús Carrasco es un escritor joven que nos sorprendió hace unos años con su primera novela, Intemperie. De lo mejor que se ha publicado en España durante muchos años. Carrasco es un escritor enjuto, con aires de hidalgo del siglo XVI y bigote de oficial del imperio austrohúngaro. Ahora tiene nuevo libro: Elogio de las manos. Le han hecho una entrevista y Carrasco dice que su ética es mirar con atención.

Solo detenerse de forma voluntaria para ver qué tenemos alrededor ya es tomar una posición ética. Prestar atención supone un reconocimiento de lo otro, de lo que no somos nosotros. Cualquier gran cambio que pretendamos empieza por la conciencia de lo que nos rodea y del tiempo en que vivimos, dice Carrasco. Prestar atención, solo prestar atención, no querer imponer esquemas ni prejuicios, mirar lo que sucede, mirar al otro. La fórmula de Carrasco es estupenda.

Feijóo ha participado esta mañana en un homenaje que le han hecho a Eugenio Nasarre, que fue diputado del PP, colaborador de esta casa, y que murió en enero. Nasarre a menudo estaba solo unos compañeros de partido que creían en una derecha tecnocrática, dedicada solo a la economía.

Nasarre fue un hombre de peso en la UCD y se integró en el PP porque creía que en política estaba basada por un ideal. Nasarre era un hombre culto, machadiano en su austeridad. Cuando llegaban los congresos del PP era de los pocos que se leían los papeles, que hacía propuestas, le gustaban debatir las ideas, hacer un trabajo cultural.

Feijóo ha recordado el valor de la Transición. Sin duda, Nasarre creía en los pactos y en la concordia. Políticamente tuvo dos pasiones: Europa y la educación. A Nasarre no le gustó la última ley de educación del PP, la que cambió Celaá, porque le parecía que tenía poca ambición y poco contenido. Nasarre estaba convencido de que la educación no solo era formación como dice cierta derecha. ¿Qué piensa el actual Partido Popular de la educación, cuáles son sus ideas fuerza?

Feijóo ha propuesto una EVAU única para todas las comunidades autónomas gobernadas por el PP. Poco más. Feijóo reivindica la unidad de España, un regionalismo amable, los valores de la Transición.

Desde luego, defender un patriotismo constitucional, la unidad de España, el valor de las instituciones es ya defender una política con contenidos. Pero cuando se repasa el programa electoral de las elecciones del pasado verano, se ve que el PP está flojito de ideas, empleo de calidad, igualdad, bajada de impuestos, educación de calidad, sin concretar nada. Alimentar a un partido solo con el Sanchismo o Antisanchismo es tener una propuesta flaquita de ideas.