Esta es la voz, el sonido de la nueva crisis. Hoy el INE nos ha dado los números del comienzo de la crisis. La economía española sufrió una importante caída en los tres primeros meses del año del 5,2 por ciento. Es de esperar que los datos del segundo trimestre, que es el más afectado por la pandemia, reflejen un hundimiento mayor. Recordemos que las previsiones apuntan a un descenso del 13 por ciento para todo el ejercicio.

Esos son los números, pero las voces de la crisis son las mujeres y las jóvenes menores de 35 años que trabajan en las "industrias sociales", esto es, el comercio, la hostelería y las actividades artísticas y recreativas. Nos lo ha contado hoy el Banco de España. Al Banco de España le parecen muy bien las dos grandes medidas que ha tomado el Gobierno: los ERTEa y las líneas de crédito ICO para las empreas. Advierten, eso si, los grandes sabios del BDE, lo que ya sabíamos: que cuando se acaban los ERTEs habrá gente que se vaya al paro. Del ERTE al Ere. Hay que seguir con los créditos ICO. El BDE dice que solo se han utilizado 58.723 millones hasta el 24 de junio de los 100.000 previstos.

No le da el Banco de España un zurriagazazo a Sánchez, pero le dice que tiene que tener mucho tino, mucho tino con lo que hace a partir de ahora. Esta crisis nos ha pillado mal porque tenemos un mercado laboral que es un desastre, porque tenemos mala educación: España se sitúa en la última posición entre los países de la OCDE en razonamiento matemático y en la penúltima en términos de comprensión lectora. Y en esas se le ocurre al Gobierno de Sánchez poner en marcha la enésima ley educativa ideológica.

Ahora hay que gastar. Para luego ajustar. Pero gastar bien. Gastar bien en capital humano. Ahora no subida de impuestos, luego sí.