Detrás de esta moderación está la energía, que ha relajado sus precios por las bajadas de impuestos o el tope del gas. Aún así, la vida sigue siendo un 9% más cara que hace un año. Lo notamos en la factura eléctrica y cuando bajamos al supermercado, en la cesta de la compra. Y es que la inflación ha provocado las mayores subidas de precios desde hace 34 años, según la Organización de Consumidores y Usuarios. La OCU. En su informe anual de supermercados, cifran en un 15% la subida interanual de los alimentos. No es un mal español, porque Europa también se enfrenta a la mayor subida de los alimentos desde la llegada del euro.

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La inflación de la zona euro marca un récord en septiembre y trepa hasta el 10%, según el dato adelantado por Eurostat. Es la primera vez que la inflación de la zona euro alcanza el doble dígito. Cifras que están impulsadas, no solo por la energía, sino también por los alimentos que aumentan al 11’8% frente al 10’6% registrado el mes pasado, en agosto.

Datos que valoraba en COPE el experto de la Universidad de Valencia, Tomás Gómez. “España ha tenido uno de los peores datos de la Unión Europea. El crecimiento en nuestro país hja sido de un 15% con respecto a lo que había hace un año. El gasto medio por persona en España en la cesta fue de 1610 euros en 2021, ahora sería en torno a 225 euros más”.

Pero, ¿es diferente a Europa?

Y, con respecto a Europa, Tomás ha contado que “hemos tenido de los peores comportamientos. Tan solo Alemania y el antiguo bloque socialista han tenido comportamientos peores al español”. De hecho, en Alemania han registrado la mayor inflación de los últimos 70 años, del 10%. En concreto, el precio de los alimentos ha aumentado a una tasa superior a la media; un 18,7% en términos interanuales. Pero ¿Qué productos han sido los que más han subido?

Pues en Alemania se nota el alza en el pollo. Sube casi un 30%. En España, nos sale un 17% más caro que hace un año. El kilo de pechugas ronda para los alemanes los 10 euros el kilo y aquí en España, los 8,50/9. Pero no es comparable porque el salario medio, no es el mismo. Ojo, un español tendría que trabajar más de 20 meses para ganar lo mismo que un alemán en un año. Hay una diferencia de más del 40% entre sueldos medios.

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Y ya que hablamos de la gallina, los huevos se han disparado también. Su precio ha subido un 19,9% de media en toda Europa. En España se han encarecido un 22,5% respecto al año pasado. En Portugal se han elevado un 33% y donde menos, por cierto, es en Francia. Han subido un 11% en un año. La docena ronda los 3’10 euros. Aquí, en España, cuesta unos 2’10; Un euro menos.

Pero volvemos a lo mismo, el salario medio, el poder adquisitivo no es el mismo. El trabajador medio en Francia cobra unos 3.100 euros mensuales. 1.400 euros más que en España. El balance del IPC en Francia se encuentra en el 5’6% y los franceses también notan el encarecimiento en el supermercado

En concreto, los precios han crecido en Francia casi un 10% con respecto al año pasado ¿Qué hay de otros productos como el pan? Que es un habitual en todas las mesas. Ha llegado a su máximo histórico y está más caro que nunca. Según Eurostat, este agosto el pan costaba en la Unión Europea un 18% más que un año atrás. Aquí en España ha subido un 15%. Más que en Italia. Allí lo ha hecho un 12%. Hablamos del pan, cuyo ingrediente fundamental es el trigo. Lo mismo que para la pasta y la pizza. La harina ha aumentado unos 20 céntimos por kilo de venta. No es lo único. Allí la inflación ronda el 9%.

Lo estamos viendo. Un mal europeo el de la cesta de la compra que tiene especial incidencia en España. Y va a tener más. Según Tomás Gómez “una parte de la renta se irá al pago de hipotecas y la subida de tipos de interés del Banco Central afecta directamente y te muerde una parte de tu renta disponible, que te impide comprar otras cosas. Luego, hay productos de los que no puedes prescindir porque son básicos y vamos a tener más dificultades para hacer la compra”. Y ya adelanta que los precios no van a tocar techo a corto plazo.