Este próximo 21 de abril Pedro Sánchez, Pablo Casado, Albert Rivera y Pablo Iglesias, confrontarán sus ideas en el debate electoral que organiza RTVE y, tan solo, 24 horas después volverán a verse las caras en un segundo encuentro en Atresmedia.

En concreto, en el debate de este lunes, cada candidato estará de pie y tendrá un pequeño atril sobre el que podrá reposar los papeles o gráficos con los que quiera respaldar sus intervenciones. El primero en hablar será el candidato de Ciudadanos y el debate lo cerrará el actual presidente del Gobierno. Una cita que se ha dividido en cuatro grandes bloques: política económica, social, territorial y pactos postelectorales.

Todos estos aspectos, parecen detalles sencillos de pactar y, sin embargo, han requerido de importantes negociaciones entre las cuatro formaciones. Por eso, en 'La Mañana de Fin de Semana' hemos querido conocer cómo se organizan este tipo de citas electorales y, para ello, hemos hablado con Manuel Campo Vidal, probablemente la persona que mejor conoce el proceso que se sigue para garantizar su celebración.

Él fue el encargado de moderar el primer debate electoral televisado de nuestra historia. Tuvo lugar en 1993 y enfrentó a Felipe González con José María Aznar. Según Campo Vidal, ambos partidos negociaron cada aspecto y de ello dejaron en un acta notarial, en la que tan solo faltó por concretar a quién correspondería el minuto final del debate. Por eso, “como no hubo acuerdo entre ellos y ya estaban presentes en el plató de Antena 3, yo tomé la decisión de ordenar aquello de una manera que me pareció justa y que de todos modos generó un rifirrafe importante”, nos ha explicado.

Campo Vidal también nos ha contado que entre los candidatos es muy habitual hablar sobre lo cansado que resulta la campaña electoral, y que la clave para organizar un debate electoral de estas características radica en construir una cadena de confianza con las partes.