La confesión de un narco en Algeciras permite a las autoridades detener a tres Guardia Civiles corruptos: "Más de 200.000 euros intervenidos"
Pablo Muñoz ha explicado en 'La Linterna' el modus operandi que tenían

Escucha la increíble historia del narcotúnel de la que todo el mundo habla
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A finales de febrero, en este mismo espacio, Ángel Expósito ya habló del narcotúnel descubierto por la Guardia Civil en Ceuta en una operación antidroga. La verdad es que en la Ciudad autónoma la existencia del narcotúnel era una leyenda urbana, pero solo ahora se ha podido confirmar su existencia, gracias a un 'arrepentido', tal y como revela el sumario del caso.
Por el camino, la intervención de más de más de seis toneladas de hachís en tres camiones y una quincena de detenidos, entre ellos tres guardias civiles corruptos y un diputado de la ciudad autónoma. Los agentes eran el nexo entre todos los arrestados, que pertenecen a tres organizaciones distintas. El periodista Pablo Muñoz, colaborador en La Linterna, ha pasado por los micrófonos de COPE para explicar las novedades.
Para comenzar, Muñoz ha querido explicar cómo se encontró el narcotúnel, ya que ahora se acaba de levantar el secreto de sumario: "Hay que recordar que en la operación Hades, que es como se ha bautizado esta investigación, hubo 14 detenidos. Entre ellos, los tres guardias civiles destinados en el Puerto de Ceuta (...). Uno de los arrestados decidió colaborar con los investigadores nada más ser arrestado y señaló a los agentes la nave en la que estaba la boca de salida del narcotúnel".
Sin embargo, en ese momento, "no declaró formalmente ni ante la Guardia Civil ni ante la juez de la Audiencia Nacional María Tardón", ha comentado Muñoz. Para hacerlo "esperó a estar encarcelado en Estremera. Entonces también explicó que los guardias civiles corruptos cobraban entre 70.000 y 100.000 euros por envío y el modus operandi de la organización", ha continuado explicando.
NOVEDADES DE LA TRAMA
Las acusaciones eran directas: "Señaló al guardia civil Rubén Galindo, ya en prisión provisional y anteriormente destinado en el Puerto de Ceuta -en concreto en la sección encargada de inspeccionar los vehículos- como la persona que 'llevaba las riendas' entre los agentes que 'les ayudaban a pasar la droga oculta siempre en camiones", todo ello según la versión del detenido.
De hecho, se está investigando porque también podría ser "el enlace entre los escalones superiores de la organización, participando en la toma de decisiones y supervisando diversas labores para culminar con éxito los envíos de sustancias estupefacientes" ha asegurado el criminal desde Tremera. De hecho, Pablo Muñoz dice que se le han intervenido 214.000 euros.

Coche de la Guardia Civil en un control
No obstante, una de las claves en toda esta historia es quién era el responsable de la nave en la que estaba el narcotúnel. Se sabe quién es, pero "todavía está en busca y captura". Es un tipo de 40 años y nacionalidad española, de nombre Rafael Jiménez, a quien le constan antecedentes por dos delitos de lesiones en 2005 y 2023, por un delito contra la salud pública en 2011 y un delito de malos tratos en el ámbito familiar en 2019.
Además, este sujeto fue el arrendatario del inmueble desde 2022 hasta el día que se localizó el túnel clandestino, explican los investigadores en sus informes. La dueña del local aportó fotografías tomadas en septiembre de 2022 en las que no se observan indicios de la existencia de la desembocadura del túnel, "siendo esta la última fecha en la que se puede acreditar que aún no se había realizado esta infraestructura" según ha contado el experto en sucesos de La Linterna. Ahora, Rafael Jiménez está huido y ya se ha dictado una orden internacional de detención.
QUIÉNES ERAN LOS GUARDIAS CIVILES
Muñoz ha asegurado que eran agentes con años de servicio en el Puerto de Ceuta, así que "conocían a la perfección las instalaciones, los encargados del control e inspección de vehículos a su paso, coloquialmente denominados como los Mecánicos". Como diría un narcotraficante, eran 'Caimanes antiguos' a los que distintas organizaciones criminales dedicadas a la introducción de hachís en la península acabaron subcontratando para garantizar el 'éxito' del camino.
Pedían "hasta 150.000 euros por operación", a cambio de garantizar el no control de los camiones con dobles fondos. Los guardias les facilitaron el cuadrante con sus horarios y turnos de trabajo, para que aprovechasen el hecho de que estuviesen de servicio. Hay dos agentes en prisión y uno en libertad con medidas cautelares)

En Algeciras se vigila muy de cerca el tráfico marítimo
Los compañeros de asuntos internos les descubrieron utilizando agentes encubiertos a través de una operación en la que se incautaron 1.397 kilos de hachís valorados en 2,6 millones de euros en el Puerto de Algeciras como destino final. Una vez que la mercancía llegó allí y se trasladó a una nave ubicada en Villanueva del Trabuco (Málaga), se intervino la droga y se detuvo a los implicados.
No obstante, hubo otras dos operaciones en las que participaron. La primera de las dos tuvo como resultado la intervención de 1.977 kilos de hachís en Málaga, valorados en 4 millones de euros, también escondidos en un camión caleteado. Y la segunda, después de cambiar el modus operandi, terminó igual: intervenida. Más de 3.000 kilos de hachís valorados en aproximadamente 6,3 millones de euros, que se dice pronto.