Expósito contaba este viernes la historia de María Jordá, una valenciana de 73 años que, tras fallecer, descubrieron que su última voluntad era donar cerca de un millón de euros. Una decisión que pilló por sorpresa a sus hermanos, su familia más cercana, ya que no había tenido hijos en vida, por lo que no tenía herederos. Y es que la vida de María fue casi de película.

Así lo relataba el director de La Linterna: “María falleció a los 73 años, era valenciana, soltera y no tenía hijos. Pero, ¿quién es María? Pues una mujer muy trabajadora, profesional e inteligente. Trabajó durante más de 50 años como costurera en Londres y que ha donado todo su patrimonio, casi un millón de euros”. Una decisión que tenía un destinatario claro y que sus hermanos no tenían idea alguna.

El destinatario del millón de euros de la valenciana

“Es una familia increíble, estoy admirado del ejemplo que nos ha mostrado su familia, porque están todos de acuerdo en una cosa: era la voluntad de María y tenía que llevarse adelante pasase lo que pasase”. Así se expresaba en La Linterna Guillermo Sanz, director científico de un centro concreto: el Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia, el destinatario del dinero. Casi un millón de euros destinados a la investigación del cáncer y las patologías cardiológicas.

Este Instituto de Investigación recibe anualmente donaciones de ciudadanos, asociaciones o empresas. Pero nunca había recibido un testamento solidario, y mucho menos de este calibre. Casi un millón de euros. Guillermo Sanz es el director científico de este centro, el Hospital Universitario y Politécnico La Fe, de Valencia.

“Estamos muy acostumbrados a recibir pequeñas aportaciones de pacientes que sienten que la investigación es importante para las personas que pueden tener lo mismo que ellas en un futuro. No estamos acostumbrados a recibir un legado de estas características y nos resultó conmovedor, no lo esperábamos”, explicaba en COPE Sanz.

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Cómo falleció María y por qué les dejó el dinero

María Jordá, por voluntad expresa, dejó por escrito que, con su dinero se apoyase la investigación que realiza el centro en las especialidades de oncología y cardiología. Tenía dos hermanos -Juan José y Vicente- y fue costurera de profesión. Desarrolló su carrera en Londres durante 50 años, algo que en ese momento (estamos hablando de los años 70) fue muy rompedor.

“Una mujer que, con 20 años, sola y sin saber inglés, emigra para trabajar como costurera era algo que no era normal. Y eso le llevó a ser verdadera empresaria, propietaria de una de las más famosas firmas de alta costuras del centro de Londres”, comentaba Guillermo Sanz a Expósito.

Fue precisamente en Londres donde conoció la tradición de las donaciones a causas relacionadas con la investigación. Además, dos de sus amigas murieron por este tipo de patologías y, más tarde, ella también padeció esta enfermedad. Por eso tomó la decisión de hacer su testamento en favor de la investigación biomédica. “Ella falleció, y es absolutamente increíble, esperando un avión en el aeropuerto de Londres para venir a España por un problema de corazón”.

La familia no sabía nada

Si en el Hospital no se esperaban recibir esa donación, su familia, tampoco. Al director científico del centro le sorprende lo unidos que están en la familia y lo mucho que están respetando y apoyando la decisión de María. “Es una familia increíble, estoy admirado del ejemplo que nos ha mostrado su familia, porque están todos de acuerdo en una cosa: era la voluntad de María y tenía que llevarse adelante pasase lo que pasase”, comentaba Sanz en COPE.

El Hospital recibe anualmente más de 500 mil euros en donaciones, a las que ahora se suma el casi millón del legado de María. Unas ayudas destinadas a sus investigadores. “Esto nos puede permitir que algunos investigadores que tienen un futuro difícil puedan quedarse de una forma indefinida en el centro trbajando en las áreas que María quería”

Por eso han creado las Ayudas María Jordá Sanz. Este mes de noviembre se lanzará la primera edición de esta convocatoria que contará con 150mil euros para la financiación de 3 proyectos de investigación. “Todos los fondos van a ser invertidos hasta el último euro en su deseo”.

Las áreas son el cáncer y las patologías cardiológicas y el objetivo de estas investigaciones es, claro, encontrar un medicamento, una solución. “Todos estos resultados tienen que acabar de alguna manera en alguna droga o medicamento que sea capaz de vencer un problema que nos estamos encontrando y que esperamos poder resolver en el futuro de manera fácil y precoz”.

En el hospital están felices y muy agradecidos con la donación por lo mucho que van a poder ayudar, y porque esto significa que están un poquito más cerca de esa cura. Guillermo anima a todos a donar y a ayudar con lo que cada uno pueda y confía en que la acción de María inspire y conciencie a otras personas sobre la importancia de ayudar a la investigación en nuestro país.

En España se firman más de seiscientos mil testamentos ante notario al año y el número de personas que deciden destinar parte o todo su patrimonio a causas solidarias va en aumento.