Nada en exceso es bueno. Tampoco el consumo de sal. Una reciente investigación alerta de que incluir en nuestra dieta más sal de la indicada puede perjudicar seriamente a la salud. “La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que sólo se consuma por debajo de 5 gramos de sal al día. Es el máximo que establece”.

El problema está, ha explicado el director de la revista QUO Jorge Alcalde, en la dificultad que supone medir cantidades tan concretas. No hay que olvidar que prácticamente todos los alimentos que consumimos ya contienen sal y por lo tanto añadir el condimento a posteriori es un gesto algunas veces innecesario: “100 gramos de carne de consumo habitual que tenemos en los supermercados tiene 2,14 gramos de sal (…) Si sumamos carne, caldos, salsas ya excedemos esos 5 gramos” ha recalcado el colaborador de ‘La Linterna’.

ESCUCHA LA SECCIÓN COMPLETA | Ciencia y salud con Jorge Alcalde

Y los datos son claros: “En España estamos en un consumo medio de 9,8 gramos de sal por persona y día, el doble de lo recomendado”.

La sal en exceso es un “impulsor de la enfermedad cardiovascular, sobre todo de la hipertensión, del aumento de la tensión arterial que genera enfermedad cardiovascular, ictus… “.  Estas Enfermedades No Transmisibles (ENT) son la causa de dos terceras partes de todas las muertes que se producen en el mundo.  

Sin embargo los extremos no son buenos y otro estudio científico publicado recientemente previene de todo lo contrario. “Demasiada poca sal tampoco es bueno. Bajar del medio gramo de sal diaria puede ser muy perjudicial para la salud” ha indicado el presidente de la revista QUO.

Por ello, concluye Alcalde, lo más importante es utilizar el sentido común: “No hay que echar sal extra a la comida de los niños ni a la nuestra, pero tampoco hay que eliminar la sal absolutamente de nuestra dieta”.