Irene Pozo: "Tenemos muchos motivos por los que estar orgullosos de nuestra fe y de nuestra Iglesia"

Este domingo celebramos el día de la Iglesia Diocesana. Un día en el que agradecemos nuestra pertenencia a la comunidad cristiana. Y un día para tomar conciencia de que somos miembros de una gran familia.

En España la labor de la Iglesia es inmensa. Basta con echarle un ojo a las cifras. Por todo el país hay más de 22.000 parroquias al servicio de toda la sociedad. Son más de 4 millones las personas atendidas en centros asistenciales de la Iglesia. Más de 10.000 misioneros españoles presentes en los cinco continentes y sacerdotes, voluntarios y seglares que dedican más de 40 millones de horas de su tiempo a ayudar a los demás.

Detrás de estas cifras hay muchos rostros y nombres concretos. Como el de Encarna que va a cumplir 80 años y todas las tardes entra en la prisión de Valencia con un grupo de su parroquia para acompañar a los internos. O como el de Gabriel de Bilbao que cuando sale cansado de su trabajo se va a un comedor social. Cada noche sirve más de 50 cenas a aquellos que lo necesitan. La labor de la iglesia también se mide en el cuentakilómetos de Rubén, un sacerdote, que cada día recorre las peligrosas carreteras de la Alpujarra granadina. Llega hasta el último pueblo para acompañar a sus enfermos y llevarles la comunión.

La Iglesia también es la hermana Carmen María que lleva más de 50 años enseñando a leer a los más pequeños. O Alberto que junto a un grupo de universitarios se tiró todo el año pasado vendiendo camisetas y mantecados para poder ir a la JMJ. Tenemos muchos motivos por los que estar muy orgullosos de nuestra fe y de nuestra Iglesia porque realmente la Iglesia Diocesana eres tú, soy yo y somos TODOS.

Hoy vamos a acercarnos a muchas de estas historias que reflejan la confianza en un mundo mejor y en una sociedad sedienta de esperanza. Bienvenido a La Linterna de la Iglesia, te saluda Irene Pozo en este viernes 10 de noviembre.