La noticia de que la Policía de San Francisco pretendía utilizar robots con 'licencia para matar' ha inquietado a la sociedad estadounidense y ha hecho que muchos expertos en ética, pensamiento humano o tecnología hayan planteado algunas preguntas que, a día de hoy, no tienen una respuesta clara.

Finalmente, la propuesta no ha salido adelante pero el melón ya se ha abierto: ¿cuánto queda para que algunos cuerpos de seguridad alisten en sus filas a robots manejados por la inteligencia artificial?

Para tratar este asunto, 'Herrera en COPE' ha llamado a una de las mayores expertas que tenemos en nuestro país. Es Idoia Salazar, fundadora del Observatorio de Impacto Social y Ético de la Inteligencia Artificial, un organismo pionero en Europa.

Y es que este escenario que se ha abierto con los robots en los cuerpos de seguridad, en el fondo, se puede extrapolar a muchos otros sectores.

De hecho, cada vez son más las empresas que deciden incorporar IA a sus procesos para que la toma de decisiones sea más fina y, por tanto, la tecnología les ayude a conseguir resultados más óptimos.

Ahora bien, ¿qué sucede si la IA se incorpora en la Administración Pública para decidir si una persona debe recibir o no una prestación?, ¿O si una IA decide si una persona está suficientemente enferma para ser ingresada en un hospital o no?

En este tipo de circunstancias, Idoia Salazar lo tiene claro: "En caso de guerra, cuando haya en juego vidas humanas o en las decisiones importantes, una inteligencia artificial no debería decidir nunca. Ahí debe tomar las riendas el humano y, en todo caso, que la IA sea un complemento para ayudarle. Porque si toman decisiones y se equivocan, ¿de quién va a ser la responsabilidad?, ¿del robot? No podemos dejar que la tecnología decida cuando debe entrar en juego la ética, el contexto...".

Difícil regulación a nivel mundial

Aunque a nivel internacional existen una serie de organismos que están tratando de regular sobre estos asuntos, esta experta en Inteligencia Artificial ve "muy difícil que se pueda llevar a cabo porque cada país se ve la realidad de una manera, siempre hay matices, tradiciones y, por lo tanto, no se puede hacer tabla rasa para todos por igual”. Este escenario va a ir evolucionando con el paso del tiempo.

Los robots y la industria del sexo

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Además, Goyo González le ha preguntado a Salazar cuánto tiempo cree que queda para que los robots se vayan a la cama con un humano. La experta ha dicho que eso no está lejos y que, de hecho, la industria del sexo con robots está muy extendida en el continente asiático, allí "es algo bastante común".