Según un reciente estudio, un 25% de los españoles estaría interesado en crear su propio negocio. De ellos, el 63% estaría dispuesto a crear su empresa fuera de España. El vivir viajando parece el sueño ansiado de una sociedad que busca esta libertad de movimiento y poder recurrir al cambio sin estar atado a la presencialidad laboral y a un puesto de trabajo que te amordaza a un espacio físico. Con la llegada del Covid y la posibilidad teletrabajar con total independencia geográfica de casi un cuarenta por ciento de la sociedad española, la idea de desvincularse del territorio donde se vive y de los antiguos modelos de trabajo más arcaicos gracias a internet.

En Estados Unidos, tras la pandemia, el número de nómadas digitales con trabajos tradicionales subió un 9 % en 2022 ; pero es que en 2020 ese número ya se había duplicado, y en 2021 se incrementó en un 42 %. Bien es cierto que con la vuelta a la normalidad, mucha gente tuvo que reincorporarse a la presencialidad, pero este modelo había funcionado tan bien en múltiples sectores relacionadas con las profesiones TIC, los trabajos creativos de generadores de contenido, la educación y la formación, el sector de las ventas, marketing y relaciones públicas así como los trabajos relacionados con las finanzas, contabilidad, consultoría, coaching e investigación que muchos fueron los que decidieron romper con sus trabajos pasados. Un 69 % de la población no ha estado dispuesta a dejar atrás este estilo de vida durante los próximos dos o tres años pero se ha visto obligada a hacerlo pues en España no ha triunfado mucho esta cultura del teletrabajo y el emprendimiento, por eso, muchas personas buscan crear una nueva ruta vital alternativa con un diferente modelo de vida.

Este es el caso de Ignacio Nieto, CEO de Companio, empresa de asesoría para montar negocios on line en Estonia, que fundó su negocio de sus ganas de emprender y gracias a las facilidades que Estonia les puso a nivel ayudas para el formar nuevos proyectos empresariales pudiendo viajar siempre que quieran con la única compañía de su ordenador portátil: “ En Estonia ya han demostrado que el sistema de teletrabajo es súper seguro. Ellos han conseguido atraer talento y emprendimiento a su país. Tienen miles de empresas fundadas por personas que no son estonios, pagando impuestos en Estonia con una comunidad de nómadas muy buena”.

Ignacio califica nuestro país de difícil para impulsar un negocio, pero de lo más cómodo en cuanto a nivel de vida se refiere. No deshecha del todo la idea de volver a España a vivir en un futuro pero de momento cree que ha ganado en nivel de calidad de vida: “Si tú a un estonio le dices que tiene que ir a una oficina... si hasta ellos votan y se casan on line”