El domingo iniciamos en España el proceso de vacunación y el lunes se esperaba la llegada de más dosis que finalmente tuvieron que ser retrasadas a este martes por problemas con la distribución y el transporte desde la fábrica alemana en la que se producen.

Por otro lado, en Alemania también han tenido problemas con la temperatura de algunos lotes de las vacunas aunque “entra dentro de lo habitual” nos dice Jorge González, director de operaciones empresa Polar Express, especializados en transporte de vacunas.

Como explica Jorge “cuando hay una excursión de temperatura, por arriba o abajo, se comunica esa incidencia al laboratorio y es el laboratorio es el que tiene que dar el visto bueno y comunicar lo que deciden hacer con ese lote”.

“Cuando las vacunas llegan a cada país las descongelan, y el transporte por carretera se está haciendo entre 2 y 8 grados cuando la temperatura óptima es de 4. Un simple 0’01 grado por encima de 8 hay que comunicarlo al laboratorio que es el que tiene que autorizar o no el uso de ese lote”, sigue Jorge.

Además nos recuerda que “hay unas tolerancias, cada tipo de vacunas tiene unas tolerancias muy concretas. Por ejemplo, la vacuna de la gripe si se produce una exposición a temperaturas superiores por picos de tiempo, por ejemplo, de una o dos horas, 1 o 2 horas no produce ningún efecto. En otras sí que puede producir otros efectos”, cuenta González.

Por otro lado, nos recuerda que la distribución de las vacunas “está muy controlado y cada sector de distribución tiene contacto directo con el laboratorio”, aunque también destaca que “aunque todo esté controlado hay factores que no se pueden programar como la climatología, el tráfico… que pueden incidir en la conservación de las vacunas y su posterior utilidad”