

El primer sonido del día de HERRERA EN COPE
"Cómo se las tendrá que ver Pedro Sánchez para tener que recurrir al club de la ceja"
Antonio Herráiz repasa los principales titulares en el primer sonido del día que marcarán la actualidad de este martes 22 de julio de 2025
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Son las 6, las 5 en Canarias.
Muy buenos días. Estrenamos Herrera en COPE del 22 de julio. Yo soy Antonio Herráiz y te voy a acompañar en las primeras horas de este martes, que viene con avisos por fuerte calor en Castilla-La Mancha y Andalucía. Hoy la máxima se sitúa en Córdoba con 39 grados. Le siguen Jaén y Granada con 38. Y atentos también a la comarca de La Mancha, donde el calor no les pilla por sorpresa, pero hoy es una de las zonas que suman avisos por altas temperaturas. La máxima en Ciudad Real capital llegará a los 37 grados. Y las mínimas esta noche han sido asumibles en buena parte de España, salvo en el litoral mediterráneo. Ya ha costado dormir. En Valencia no han bajado de los 25 y tampoco han caído de los 23 grados en Castellón o en Barcelona.
Martes con un pleno extraordinario en el Congreso. Es el último del curso político y lo de hoy vuelve a reflejar la agonía parlamentaria de Sánchez. Iba a presentar la ley Bolaños como un triunfo. Iban a aprobar la reducción de la jornada laboral para mayor gloria de Yolanda, la líder de Sumar, Yolanda Díaz. Y ni una cosa ni la otra. El partido de Puigdemont les ha dicho que o cambian mucho las dos normas que atienden a su permanente chantaje o que se vayan despidiendo, y no han tenido más remedio que retirarlas.
En cuanto a la jornada laboral, ahora mismo la ley marca un máximo de 40 horas semanales, aunque muchos convenios están por debajo. Quieren reducirla a 37 horas y media a la semana. ¿Qué le dijeron los de Junts? Que si dejaba el debate con el planteamiento inicial iban a mantener su enmienda a la totalidad. Eso habría provocado la devolución del texto al Gobierno y el proceso legislativo habría quedado bloqueado, habría quedado muerto. Para no quedar en evidencia, lo retiraron y punto. Por eso no va hoy. Los de Junts son chantajistas, eso lo vienen demostrando, no lo ocultan, pero no son tontos. Y los empresarios catalanes, a la derecha catalana, les advirtieron que, de aprobarse esa reducción, tendría un incremento de sus costes laborales estimado en 23.000 millones de euros. Menos horas, menos productividad, menos rentabilidad y, por tanto, pérdida de competitividad. Esto iba a afectar de forma sensible a sectores como la construcción, la agricultura, la hostelería, que arrastran ya de por sí un déficit importante de profesionales. Era la advertencia que lanzaba aquí José Luis Álvarez Almeida, que es presidente de Hostelería de España.
Pues con todo esto, el pleno escoba en el que Sánchez quería presumir de estos dos trofeos antes de irse de vacaciones se queda en nada, o en casi nada, con lo del cambio del reglamento del Congreso de los Diputados para que pase a llamarse Congreso a secas y para vetar también a periodistas que no son del gusto de la izquierda su entrada en el Parlamento. Poco más, porque Podemos le ha dicho que no cuente con ellos para el decreto antiapagón y si el PP no vota a favor o no se abstiene, no saldrá adelante. Esto queda en el aire ahora mismo.
¿El PSOE, qué dice? Pues sale, pide el auxilio del Partido Popular una vez que su socio de Podemos le ha dicho que no cuente con ellos para este decreto antiapagón. Bueno, a la vista de todo esto, el Gobierno no va a poder utilizar el pleno de hoy como un flotador al que agarrarse, y lo que se espera de la sesión es que, bueno, habrá que contar las veces que pronuncian desde las filas socialistas, desde la bancada socialista, la palabra Montoro. Esto lo van a estirar todo lo que puedan. Ya no solo en el pleno de hoy, si les llega hasta otoño y, a poder ser, hasta las campanadas de fin de año. Todo para no hablar del caso Cerdán, de Ábalos, de Koldo y, en definitiva, del caso PSOE.
Lo último es que el juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, ha retirado el pasaporte a la expresidenta de Adif, a Isabel Pardo de Vera, también al exdirector general de Carreteras. Están investigados por pertenencia a organización criminal y se les investigan los delitos de cohecho, tráfico de influencias, prevaricación y malversación. El juez entiende que jugaron un papel esencial en el amaño de contratos a costa de mordidas. Eran altos cargos del Ministerio de Ábalos y, por tanto, del Gobierno de Sánchez, que esto se omite muchas veces. No es que eran del equipo de Ábalos, no: eran altos cargos del Gobierno de España.
La autodefensa de Pardo de Vera no deja de ser llamativa. Señala a Koldo, al asesor de Ábalos. Dice que le trataba con cierto desprecio, con frases del tipo: “Bonita, te tienes que llevar bien con el ministro”, y que se mofaba de ella cuando se quejaba por la insistencia del asesor con las obras. Esto es un victimismo barato, sin más. Ni denunció las mordidas en su momento. Ni tampoco la contratación en Adif de Jessica, una de las novias de Ábalos, de la que Pardo de Vera es cómplice. Bueno, cuando participaba de la corrupción no escuchamos a Pardo de Vera quejarse. Es que hay un asesor del ministro que me dice “bonita”, Milana bonita, como la novela de Delibes, como Los santos inocentes.
En fin, con las novedades que continuamos conociendo con las investigaciones que acercan al presidente, al Gobierno, a su familia, con las instrucciones judiciales que siguen su curso. Por cierto, no con pocas dificultades en ninguno de los dos casos. Con todo esto faltaba recuperar el Club de la Ceja en versión 2025. Un grupo de artistas, políticos y periodistas —que ahora te cuento quiénes son, pero que no te va a sorprender ninguno— han firmado un manifiesto en defensa de Pedro Sánchez. Piden la continuidad del Gobierno y alertan de una conspiración para derribarlo.
¿Quién está detrás de ese texto? Te lo puedes imaginar. Los Almodóvar, los Miguel Ríos, Víctor Manuel, Ana Belén, que hace apenas un mes dudaba sobre si podía seguir apoyando a Sánchez pero que ha vuelto al redil. Serrat, Estopa, Leiva, Marisol… En fin, no sé si te sorprende alguno, ¿verdad? Y luego hay políticos, artistas de la política, pero de la política corrupta, como el expresidente andaluz Manuel Chaves y la exministra Magdalena Álvarez. Los dos condenados por el megafraude de los ERE, con sentencia de la Audiencia de Sevilla, con la ratificación del Supremo y luego exonerados por el Constitucional de Cándido Conde-Pumpido, es decir, por Pedro Sánchez. Cómo no van a querer que siga este Gobierno si les ha perdonado el grueso de los delitos por los que fueron condenados. Y entre los firmantes, bueno, no podía faltar ahí Luis García Montero, que es el director del Instituto Cervantes desde 2018, con un sueldo que al año supera los 110.000 €. Como para no gritar que Sánchez siga en Moncloa. Y así, una larga lista en la que aparecen los exministros Manuel Castells, Alberto Garzón —que no pasarán a la historia ninguno de los dos por nada destacado de su paso por el Gobierno de Sánchez— o los exministros socialistas Joan Clos, Leire Pajín, Mercedes Cabrera o Julián Campo.
Cuando tocan lo de Cerdán o lo de Ábalos vienen a concluir: bueno, lo de las prostitutas no está del todo bien. Lo de las mordidas está feo. Que dos secretarios de Organización del PSOE, uno de ellos también ministra, hayan formado parte de una organización criminal, según los informes de la UCO, pues igual no es del todo ético o del todo estético. No, pero Sánchez no es el responsable. Dicen: “Los únicos pecados que ha cometido el presidente los resumen en dos cuestiones: primero, falló en elegirles y, segundo, por no vigilar lo que hacían”. Vamos, la tesis de Moncloa. Y los artistas de este manifiesto —los políticos-artistas también que lo respaldan— cargan contra los de siempre. Primero contra los jueces, por abrir investigaciones, dicen, prolongadas. Segundo, contra los medios que no siguen los dictados de Sánchez, por, dicen, tergiversar la realidad. Miran también a la oposición, por liderar una conspiración para derribar un gobierno legítimo. Y, claro, no podía faltar la Iglesia, que es otro blanco fácil. Por cierto, en la versión 2025 del Club de la Ceja no sorprenden los que están, pero sí alguna ausencia destacada como la de Joaquín Sabina. Cómo se las tendrá que ver Pedro Sánchez para tener que recurrir al Club de la Ceja. Ya digo, en versión 6.0, en versión del año 2025.