Tiene 79 años y a lo largo de cuatro décadas ha dejado un rastro de cadáveres en 14 estados.

El siniestro historial de Samuel Little pasó desapercibido para las autoridades durante cuatro décadas. Según su confesión, empezó a matar en 1970 y no paró hasta 2005. Eran mujeres solas.

De este asesino se sabe que nació el 7 de junio de 1940 en Georgia. Llevó una vida de vagabundo y fue detenido decenas de veces, aunque nunca fue condenado.

Curiosamente, Samuel Little no fue detenido por sus crímenes, sino por un asunto de drogas. Fue al hacerle las pruebas de ADN, cuando se le relacionó con tres muertes de mujeres en Los Ángeles. Habían sido estranguladas.

Para lograr encontrar al resto de las víctimas, el FBI ha facilitado en su página web vídeos y detalles de cinco confesiones del asesino y un mapa con los lugares de los asesinatos.

En una de las confesiones, declara haber matado a una mujer negra en Nueva Orleans, de la que recuerda perfectamente su "vestido con botones en la parte delantera". La conoció en un club y la llevó a un camino de tierra. Allí la estranguló y arrojó su cuerpo a un canal.

Medio centenar de estas historias ya tienen nombre y apellidos. Faltan 43 casos más.