Este jueves nos deja, también, la historia de Daniel Bramble. Hasta hace unos meses… se preparaba para competir en los Juegos Olímpicos de Tokio. Daniel es saltador de longitud profesional en el Reino Unido...

Pero la llegada de la pandemia lo ha cambiado todo. Con el aplazamiento de la competición… la Asociación Olímpica Británica ha recortado sus fondos. Y Daniel ha sido uno de los perjudicados. Y eso que su marca personal es bastante buena.

Daniel es campeón de pista cubierta en su país donde ha conseguido saltar 8 metros y 21 centímetros. Una distancia con la que hubiera conseguido un meritorio quinto puesto en los anteriores Juegos Olímpicos, en los de Río de Janeiro.

Sin ayudas para continuar entrenando… este atleta ha cambiado las pistas de entrenamiento por un volante. Ahora trabaja como repartidor para una conocida compañía digital.

Su historia la hemos conocido después de que, él mismo, haya compartido un mensaje en sus redes sociales. A un lado de la fotografía, aparece Daniel saltando… en el otro, Daniel con varios paquetes en la mano…

Pero la reacción de muchos compatriotas no se ha hecho esperar. Se han ofrecido para ayudarle económicamente…

“Estoy muy agradecido a todos vosotros”, ha dicho Daniel. “Sólo quería mostrar la realidad que hay detrás de algunos deportistas de élite”.