Pues este viernes, Carlos, nos deja, también, la curiosa historia de Bill. Este perro, de raza Lurcher londinense, se ha hecho popular esta semana gracias a unas imágenes compartidas por su propio dueño en Facebook.

Este hombre llamado Rusell Jones se lesionó su tobillo derecho. Y tuvo que ser escayolado. Así que en el vídeo compartido se le ve andar ayudado de dos muletas y sin apoyar la pierna lesionada. Hasta ahí todo normal. Lo alucinante viene a continuación.

Jones avanza por la calle acompañado por su perro Bill. El animal también anda sin apoyar una de sus patas. Vamos, que cojea como su dueño. Jones lo llevó al veterinario y las pruebas concluyeron en que el perro no sufría ninguna lesión.

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Lo que estaba haciendo Bill era imitar a su dueño. Una conducta propia de los perros que, como animal de manada, se comporta como los que tiene alrededor. En este caso se demuestra algo. ¿Se acuerdan de la película ‘101 dálmatas’, de Disney, donde aparecen perros y dueños completamente iguales? Pues como ven… la realidad, una vez más, ha superado a la ficción…

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