Con los indultos a los líderes independentistas cada vez más cerca, el debate se centra ahora en los rumores sobre posibles cambios en el Gobierno, y con ello, una remodelación ministerial. La pregunta que trasciende es qué ministros se quedarán y cuáles deberán abandonar el Ejecutivo bajo la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quién deberá tomar una decisión partiendo de las decisiones que se han tomado desde cada uno de los Ministerios y las polémicas que han desencadenado, sin obviar la estabilidad de la coalición entre PSOE y Unidas Podemos.

Carmen Calvo

La vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, ha sido también foco de la polémica en varias ocasiones, la gran mayoría de ellas han sido, precisamente, por utilizar el feminismo para justificar muchas de las desiones tomadas desde el Gobierno.

La última, sin ir más lejos, viene a raíz de la subida del precio de la factura de la luz. Hace tan solo unos días, Calvo decidió ironizar sobre la polémica por las tarifas de la luz, que han llevado al Gobierno a recomendar actividades como la plancha o la lavadora a la madrugada para poder ahorrar en la factura, y aseguró que "el temazo no es a qué hora se pone la lavadora o se plancha, sino quién plancha y quién pone la lavadora".

Tampoco podemos obviar los indultos. Recientemente también defendió la figura del indulto para "contrapesar" los poderes del Estado y alegó que la última palabra sobre la decisión es del Gobierno.

Nadia Calviño

Nadia Calviño es una de las ministras mejor valoradas del Gobierno de Pedro Sánchez y tampoco ha sido protagonista de grandes episodios conflictivos. Sí puede destacarse, sin embargo, la reacción de la ministra de Economía frente a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, cuando aseguró que iba a derogar la reforma laboral aprobada por el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

La fotografía tuvo lugar hace algunas semanas, cuando durante la Sesión de Control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Calviño suspiró y miró al cielo en varias ocasiones ante las declaraciones de su homóloga de Trabajo, lo cual evidenciaba las discrepancias cada vez más evidentes entre Podemos y PSOE. No obstante, si bien es cierto que hay rumores de que podría estar postulándose para varios puestos internacionales, la figura de Calviño tiene cierta credibilidad en el seno de la Unión Europea, por lo que una destitución podría tener graves consecuencias para Sánchez.

Yolanda Díaz

La ministra de Trabajo tampoco ha sido especial protagonista de polémicas. Tras la marcha de Pablo Iglesias del Ejecutivo, Yolanda Díaz pasó a ocupar, además de su cartera de Trabajo, la vicepresidencia tercera del Gobierno. En cuanto a conflictos o episodios que han dado mucho de qué hablar, el más trascendental está relacionado con los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo. Fue a principios de abril del año 2020, cuando la titular de Trabajo tenía que ofrecer uno de los peores datos del paro y destrucción de empleo de España de la serie histórica a causa de la pandemia de la covid-19. Fue especialmente cuando tuvo que explicar la diferencia entre las personas que habían sido despedidas y quienes estaban afectados por un ERTE. A la hora de explicarlo, la ministra se hizo un lío, que le llevó a titubear y buscar apoyo en su compañero, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá.

Teresa Ribera

La ministra de Transición Ecológica llegó con grandes expectativas y desde el principio de la legislatura se mostró en contra de los coches diésel, vehículos a los que quería incluir ciertas limitaciones. Una serie de vaivenes que provocaron diversas protestas en el sector, que la acusó de la caída en las ventas de este tipo de vehículos. Un debate aún sobre la mesa, ya que esta política ecológica de la que tanto habló Ribera todavía no se ha cumplido y aparentemente no hay previsiones de que, por ahora, pueda hacerlo.

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Tampoco podemos olvidar el incremento del precio de la factura de la luz, que afecta a todos los ciudadanos españoles y que ha sido una fuente de críticas y reproches.

Arancha González Laya

La ministra de Exteriores, si bien ha servido como nexo de unión en la diplomacia con varios países, ha estado en el ojo del huracán recientemente tras el asalto masivo de inmigrantes a la valla de Ceuta. El día antes de que se produjera una de las mayores crisis migratorias en España, Laya aseguró que no tenía constancia de que la llegada de 145 inmigrantes (antes de las horas más crudas de la crisis), pudiera ser una medida de presión de Marruecos por la presencia del líder del Frente Polisario en un hospital español. Horas después, fueron cerca de tres mil los que habían accedido a la ciudad autónoma. Aún a día de hoy, las relaciones con Marruecos están completamente rotas debido a la posición inamovible de España sobre el Sáhara.

Juan Carlos Campo

El titular de Justicia tampoco puede presumir de haber estado a la altura de las circunstancias. Recordemos la parálisis judicial, agravada por la pandemia de coronavirus, que ha paralizado casi por completo la renovación de los cargos del Consejo General del Poder Judicial, que teóricamente debería ser imparcial y al que el Gobierno quiere designar.

Margarita Robles

La ministra de Defensa es una de las mejores valoradas del Gobierno de Pedro Sánchez y no se ha caracterizado por entrar en conflictos, sino todo lo contrario: destaca su carácter moderado y conciliador frente a los conflictos. Robles ha abogado siempre por el respeto, la unidad, la democracia y, muy especialmente, por la defensa de la Constitución por encima de los ataques contra la misma, por lo que podría descartarse que Robles fuera una de las ministras a las que Sánchez pudiera destituir de su cargo.

María Jesús Montero

La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno ha sido especial protagonista en las últimas semanas tras anunciar una reforma fiscal dentro del marco del Plan de Recuperación remitido a Bruselas, que para muchos es considerado un "sablazo y hachazo fiscal". El Ejecutivo prevé empezar a aplicar algunos "pequeños ajustes" de impuestos antes del año 2023, que afectarán al IRPF, los impuestos de sociedades o el IVA entre otros muchos.

Fernando Grande-Marlaska

El ministro de Interior sufrió recientemente un duro varapalo cuando la Audiencia Nacional ordenó al titular de Interior que anulara el cese del coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid, quien fue expulsado del cuerpo por no informar sobre la causa del 8-M. Fue así como Pérez de los Cobos pidió al Ministerio que se le readmitiera de nuevo.

Sin embargo, el asunto más delicado ha sido la transferencia de prisiones a País Vasco, así como el acercamiento de decenas de etarras a cárceles cercanas. Así, ya solo quedan diez presos en cárceles alejadas de la comunidad. La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) ha cargado muy duramente desde los primeros desplazos al Gobierno de Pedro Sánchez, así como al titular de la cartera de Interior. La oposición ha reprochado también la posición del ministro pero, aparentemente, no debería ser una de los ministros sustituibles para Sánchez, ya que de hacerlo dejaría caer la premisa de que el Ministerio no ha actuado todo lo bien que debía.

José Luis Ábalos

El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha sido uno de los grandes protagonistas del Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos por su cadena de polémicas. El asunto más destacable, y por el que se llegó a pedir su dimisión, fue el asunto del 'Delcygate'. El ministro se reunió de forma clandestina con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas a finales de enero del año 2020. Una reunión de la que no se tuvo constancia hasta varios días después. Una reunión llena de críticas y reproches, ya que Rodríguez tenía vetada la entrada a suelo europeo por las violaciones de derechos humanos en Venezuela.

Tampoco podemos olvidar el rescate a la aerolínea Plus Ultra, con tan solo cuatro aviones y muy vinculada al chavismo. El SEPI, dependiente de Haciendo, desembolsó aproximadamente 53 millones de euros para salvar una compañía que jamás obtuvo beneficios. Si bien es cierto que al principio quiso desentenderse del asunto, más tarde trascendieron informes en los que se le vinculaba de forma muy estrecha con el rescate de la aerolínea, lo cual sirvió para que los partidos de la oposición pidieran de nuevo su dimisión.

También podemos recordar una fotografía de José Luis Ábalos y Adriana Lastra, la portavoz parlamentaria del grupo socialista en el congreso, fumando en los exteriores de la Cámara Baja sin respetar la distancia social. También ha defendido en varias ocasiones el acercamiento entre el Gobierno y EH Bildu para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado, entre otras polémicas.

Isabel Celaá

La ministra de Educación ha sido protagonista de diversos conflictos, especialmente por la denominada ley Celaá, que ataca y afecta de forma directa a las escuelas concertada. Esta ley, aprobada en el Congreso de los Diputados, elimina el español como lengua vehicular en los centros educativos, así como vulnerar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos. Diversas asociaciones han protestado a lo largo de estos meses contra las medidas impuestas desde la cartera de Celaá.

Reyes Maroto

La ministra de Industria, Comercio y Turismo es otra de las ministras de Pedro Sánchez que tampoco ha trascendido especialmente por las polémicas y apenas ha tenido conflictos durante la legislatura.

Luis Planas

Al igual que Reyes Maroto, el ministro de Agricultura no ha sido especialmente polémico y a priori no está manchado, todavía, por ninguna polémica.

Miquel Iceta

El ministro de Política Territorial ocupó la cartera tras la marcha de Salvador Illa para liderar al PSOE en Cataluña. Carolina Darias pasó a ocupar la cartera de Sanidad y el entonces líder de los socialistas en Cataluña pasó a ostentar el Ministerio de Política Territorial. Desde que está en el cargo, hace tan solo unos meses, no hay asuntos polémicos reseñables aunque sí trascienden todos aquellos anteriores a su llegada al Ministerio. Es especialmente destacable la propuesta sobre el referéndum de autodeterminación que defendió Iceta en las elecciones catalanas del año 2012, en las que se apostaba por el derecho "a decidir a través de un referéndum acordado en el marco de la legalidad". Sin embargo, y durante estos meses, Iceta no ha sido especialmente polémico y su figura ha quedado relativamente ocultada.

José Manuel Rodríguez

El ministro de Cultura y Deporte ha sido otra de las figuras que apenas ha tenido trascendencia durante su legislatura. Sus apariciones, siempre ligadas a los actos establecidos en su agenda, no ha sido de los miembros más conflictivos del Gobierno y apenas hay episodios reseñables sobre su labor.

Carolina Darias

Los rumores dentro del Gobierno dejarían entrever que la figura de Darias al frente del Ministerio de Sanidad no ha estado a la altura de las expectativas. Darias ha sido la protagonista de varios episodios de confusión, todos ellos relacionados con la pandemia de coronavirus. Desde la segunda dosis con AstraZeneca hasta las restricciones y, en muchos casos, declaraciones fuera de lugar. No obstante, tampoco hay indicios que puedan apuntar directamente de una destitución de Darias, ya que ni desde el Gobierno ni desde el partido ha habido quejas sobre ella.

Ione Belarra

La marcha de Pablo Iglesias del Gobierno, empujó a Ione Belarra a ostentar el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 de España. Por el momento, y tras su reciente llegada al cargo, apenas ha tenido ocasión de ser la protagonista de ninguna polémica. Sí es cierto que anteriormente había experimentado algún que otro encontronazo con la ministra de Defensa, Margarita Robles, por ahora no hay polémicas reseñables.

Pedro Duque

El ministro de Ciencia e Innovación tampoco ha sido especial protagonista de grandes polémicas en la última legislatura, más que nada porque apenas ha tenido especial relevancia. Sus apariciones públicas han sido pocas y tampoco ha querido pronunciarse sobre aquellos asuntos que podrían salpicar directamente al Gobierno. No obstante, hay rumores de que ni tan siquiera él mismo tendría especial interés en continuar, tal y como han trasladado fuentes del Ejecutivo.

Irene Montero

La ministra de Igualdad es, precisamente, una de las dirigentes políticas con más episodios polémicos. Se puede destacar el "todos, todas, todes", en un intento por utilizar el lenguaje inclusivo que sirvió como precedente para toda una lluvia de críticas. No obstante, la más destacable ha sido la polémica por la niñera. Al parecer, Montero y su pareja, Pablo Iglesias, habrían pagado el sueldo de la mujer que cuidaba de sus hijos, María Teresa Arévalo, con dinero del propio Ministerio de Igualdad.

Un asunto que irá a juicio, después de que un juez de Madrid abriera diligencias previas por un presunto delito de administración desleal contra la ministra Irene Montero y una asesora de su equipo para determinar si esta trabajadora desempañaba funciones como cuidadora de su hija menor pagada con fondos públicos.

Alberto Garzón

Sus apariciones no han sido especialmente destacables, pero el ministro de Consumo ha sido el protagonista de varios episodios polémicos. Uno de ellos fue el de la subida del IVA en varios productos como en bebidas gaseosas y refrescos, lo cual fue muy duramente criticado, especialmente por los usuarios. Tampoco podemos olvidar de sus palabras contra el Rey Felipe VI, al que acusó hace varios meses de "maniobrar contra el Gobierno". Unas declaraciones que llevó a que la oposición solicitara el cese inmediato del titular de Consumo y líder de Izquierda Unida.

José Luis Escrivá

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha sido otro de los grandes protagonistas de la legislatura. Ha cobrado especial relevancia por las pensiones, ya que al parecer estaría dispuesto a frenar las prejubilaciones y rechazar eliminar los coeficientes reductores con carácter retroactivo por su elevado coste. Una decisión que fue duramente criticada por el socio de Gobierno, Podemos, quien le ha pedido en varias ocasiones para que explicara esta decisión.

Manuel Castells

El ministro de Universidades ha sido uno de los menos polémicos precisamente por su casi total ausencia durante la legislatura y ese asunto ha sido, precisamente, el foco del conflicto. Desde que se conformó el Gobierno de Pedro Sánchez y comenzó la pandemia de coronavirus, los estudiantes han reprochado que el ministro no diera apenas explicaciones sobre cómo se iba a desarrollar el curso escolar. Sin directrices, ni prácticamente apariciones, Manuel Castells tiene muchas papeletas para ser uno de los ministros destituidos por Pedro Sánchez.