Pamplona honra a San Saturnino con la última salida de la Comparsa antes de San Fermín

Pamplona se prepara para vivir su día grande con la celebración en honor a San Saturnino, su patrón. Este 29 de noviembre, la ciudad se llena de historia y tradición en una jornada marcada en el calendario de todos los pamploneses, que salen a la calle para acompañar a la corporación municipal y a la Comparsa de Gigantes y Cabezudos.

El origen de un patrón eclipsado por San Fermín

La figura de San Saturnino es fundamental para entender la llegada del cristianismo a la región. Según explica Juan Echenique, responsable de comunicación del arzobispado de Pamplona en COPE Navarra, San Saturnino fue un "hábil predicador" del siglo III que consiguió, junto a San Honesto, la conversión de miles de vascones y romanos. Entre ellos se encontraban figuras tan conocidas como San Fermín y su familia.

 "Yo suelo decir que el pobre San Saturnino siempre está a la sombra de San Fermín", comenta Echenique. Muchos confunden al patrón de Pamplona con el de Navarra, un error común que el propio Echenique califica como "la típica pregunta de concurso de televisión que se le hacen a alguien que no es de aquí y falla".

Es la típica pregunta de concurso de televisión que se le hacen a alguien que nos dé aquí y falla"

Juan Echenique 

Un dato curioso es que, aunque el santo fue martirizado en el año 250, su culto no llegó a Pamplona hasta el siglo XII. Fueron los pobladores franceses del Burgo de San Cernin quienes trajeron consigo la devoción por el santo, que ya estaba muy desarrollada en la zona de Toulouse.

La última salida de la Comparsa

Uno de los actos más esperados es la procesión, que cuenta con la participación de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos. Para ellos, es la última salida del año, como confirma su presidente, Ibon LasPeñas. La jornada comienza a las 9:30 de la mañana en la estación de autobuses para acompañar a la corporación municipal en un recorrido que finaliza de nuevo en el ayuntamiento con los bailes en honor a la ciudad.

Las Peñas destaca la emoción del día, especialmente por la reacción de los más pequeños. "Si por algo lo hacemos es es por eso, por toda por toda la ciudad y sobre todo por todos los txikis que hay en Pamplona, pues que nos tienen verdadera admiración", afirma. Las caras de ilusión de los niños al ver a los gigantes son algo que, según sus palabras, "no tiene precio, la verdad".

Braulia y Caravinagre, los más aclamados

Dentro de la Comparsa, hay figuras que se llevan todas las miradas. "De gigante, sin lugar a dudas, la Braulia, o sea, se lleva todas las miradas", asegura Las Peñas. Entre los kilikis, el más icónico es Caravinagre, mientras que el cabezudo del alcalde es el encargado de marcar el ritmo de la comitiva.

El día de San Saturnino marca un punto y aparte en el calendario festivo de la ciudad, dando paso al inicio de la Navidad con el tradicional encendido de las luces por la tarde. Es el cierre de un ciclo que, para muchos, como los miembros de la comparsa, solo renueva la ilusión para la siguiente gran cita: San Fermín. Como dice Las Peñas, "es todos los años vivir una final".