Un ganadero resulta herido tras ser embestido por un toro en Alsasua

Un ganadero de 40 años ha sido hospitalizado este viernes tras sufrir una fuerte embestida por parte de un toro en una finca de la localidad navarra de Alsasua.

Traslado urgente a Pamplona

El suceso ha tenido lugar sobre las 11:08 horas de este viernes, cuando el trabajador se encontraba realizando sus labores habituales en una explotación ganadera. Por causas que se investigan, el hombre fue violentamente golpeado por un toro, sufriendo un fuerte impacto en la zona lumbar. Este tipo de accidentes laborales en el sector primario ponen de manifiesto el riesgo constante al que se enfrentan los profesionales que trabajan directamente con animales de gran tamaño, cuya reacción puede ser impredecible.

Amplio dispositivo de emergencias

Tras recibir el aviso del accidente, hasta el lugar se movilizó un completo equipo de emergencias. La rápida actuación incluyó a los bomberos del parque de Alsasua, un equipo médico de la zona que realizó la primera valoración sanitaria, y agentes de la Policía Foral, que se hicieron cargo de las diligencias. La gravedad del golpe obligó a activar una ambulancia de Soporte Vital Avanzado (SVA), medicalizada, para garantizar un traslado seguro y monitorizado del herido en todo momento.

Diagnóstico y pronóstico

En una primera instancia, el ganadero de 40 años fue atendido en el centro de salud de Alsasua para estabilizar sus constantes y realizar una evaluación inicial de los daños. Sin embargo, la naturaleza del golpe aconsejó su evacuación a un centro hospitalario de referencia. Finalmente, la ambulancia medicalizada lo trasladó al Hospital Universitario de Navarra, en Pamplona, donde ingresó con un diagnóstico de traumatismo lumbar, una lesión que puede revestir diversa gravedad y que requiere estudios radiológicos para determinar su alcance exacto.

Los accidentes derivados del manejo de ganado bovino son una de las principales preocupaciones en materia de seguridad laboral en el campo. El instinto animal, el estrés o movimientos inesperados pueden provocar situaciones de gran peligro, incluso para los ganaderos más experimentados. Las autoridades insisten periódicamente en la importancia de extremar las precauciones y aplicar protocolos de seguridad estrictos durante el trabajo diario en las explotaciones para minimizar estos riesgos inherentes a la ganadería.