Lugo, 22 de mayo.- Xosé Chorén, un titulado en Relaciones Laborales de 52 años,con varias décadas ligado a la empresa pública Correos, encabeza la candidatura de Lugonovo en estas elecciones y asume la responsabilidad de mantener el peso de la marca de En Marea en la corporación municipal, después de cuatro años convulsos, marcados por dos dimisiones en el grupo municipal y la escisión de Podemos.

Nacido en Taboada, pero vecino desde hace “muchísimos años” -como él mismo dice- del barrio de A Milagrosa, Chorén siempre ha trabajado en Correos, donde empezó como cartero eventual en Taboada hasta llegar a ser jefe del Sector de Oficinas para Lugo y el Occidente de Asturias, cargo que ostenta en la actualidad, después de haber sido jefe de la Oficina Principal de Lugo y de haber prestado servicio en diversos puestos en Madrid, A Coruña, Jaén o Bilbao.

Este aficionado al cicloturismo y a los deportes de motor, casado y con dos hijos de 25 y 20 años, fue también miembro de la ejecutiva de la CIG y estuvo siempre vinculado de un modo u otro al sindicalismo y al activismo político, aunque su única incursión en la primera línea política tuvo lugar entre los años 2007 y 2011, cuando formó parte de la corporación municipal de Lugo como concejal del BNG.

Chorén ha sido el elegido para encabezar la lista de Lugonovo después de que Cristina Pérez Hérraiz, número 2 de la candidatura, fuese designada para encabezar la candidatura de En Marea al Congreso por esta provincia.

Pérez Hérraiz había asumido la portavocía de Lugonovo a mitad de mandato, cuando se produjo la dimisión y renuncia a su acta de concejal del que fue cabeza de lista en los últimos comicios locales, Santiago Fernández Rocha; una marcha a la que sumaría más tarde la de otro de los tres ediles del grupo municipal, Iñaki García.

El candidato de Lugonovo dejó entrever el mismo día de su presentación su predisposición a formar parte de un gobierno de coalición si los resultados electorales lo favorecen y hay disposición por parte de los demás partidos de izquierda, dado que en el último mandato su partido apoyó la investidura de Lara Méndez, pero luego decidió mantenerse en la oposición.

Asegura que su intención es hacer que el partido al que representa sea “útil”, para evitar que el Ayuntamiento siga “bloqueado”.

“Nuestro objetivo no es vivir en las barricadas”, dijo Chorén, sino aportar “sentidiño y estabilidad” al Ayuntamiento de Lugo, aunque también reconoció que para llegar a acuerdos “no basta con una parte sola”.

“Ojalá que tengamos reciprocidad”, dijo el candidato de Lugonovo.