Empiezan a sancionar los dos multamóviles del ayuntamiento de Santiago de Compostela

Los conductores que aparquen mal en Santiago van a incrementar el riesgo de ser sancionados a partir de la semana próxima. Según las previsiones del ayuntamiento será el lunes cuando empiecen a multar los dos "vehículos de control del estacionamiento" que llevan más de un mes en pruebas.

Son un Renault Clio y un Opel Aguila de color blanco y verde que tienen instaladas en el techo cámaras para detectar vehículos mal apartados por la ciudad.

La prioridad de la concejalía de Tráfico es inicialmente el control de las zonas verdes (de aparcamiento para residentes) y las reguladas para dejar el coche solo 15 minutos. El propio concejal Gonzalo Muíños manifestaba estos días en Cope Santiago que hay conductores que dejan el coche mucho más tiempo en esos espacios.

La adquisición de esos dos vehículos para detectar de modo más eficaz infractores tiene sus partidarios y sus detractores. Entre los primeros, la asociación de vecinos A Xuntanza, en San Pedro, que se preguntaba estas últimas horas a través de su cuenta de twitter si esos dos vehículos van a perseguir también el paso y estacionamiento en zonas peatonales.

"O de esta placiña é intolerable" denuncian junto a una foto de la zona de Fonte da Angustia, a la que no pueden entrar vehículos pero en la que es habitual verlos.

Desde A Xuntanza se preguntan también si los multamóviles van a trabajar también durante los fines de semana.

Cómo aparcar en las zonas verdes

Con la entrada en funcionamiento de los vehículos de control de estacionamiento son muchos los vecinos de los barrios de Santiago que se apresuran a sacar tarjeta de residente para poder aparcar junto a sus casas, en las zonas habilitadas como verde.

Pueden solicitar la tarjeta las personas empadronadas en Santiago que paguen el impuesto de circulación en la ciudad.

Una vez tramitadas, las tarjetas de aparcamiento para residentes se retiran de las oficinas de TUSSA en la estación intermodal de Santiago de Compostela.

La experiencia del multamóvil la toma Santiago de la ciudad de Pontevedra, donde ya funciona un sistema similar desde hace años.