Entre un partido de baloncesto, un concurso de talento y una masterclass de tecnología. Así ha sido la segunda edición de la Gran Final de la Liga Maker Drone, impulsada por la Fundación Barrié y el Instituto Tecnológico de Galicia y celebrada este viernes en el Coliseum de A Coruña.

Más de 180 escolares de toda Galicia han competido en la segunda edición del concurso, aunque fueron 1200 los asistentes al recinto multiusos. Desde las gradas, animaban con pancartas, bombos y ovaciones a sus respectivos equipos.

RECOGIDA DE RESIDUOS MARINOS

Representantes de 18 centros educativos volaron un dron que idearon, diseñaron, construyeron y programaron en los últimos meses. Tenía que recoger residuos marinos de un barco y depositarlos en contenedores de recogida selectiva, en un escenario que recreaba la basura como una bola de colores que había que recoge con el dispositivo.

Este es un escenario real, que se da en la labor de los pilotos ya adultos. Sin embargo, en esta simulación, los problemas han sido resueltos alumnado de 13 años, estudiantes de 2º de ESO, tras meses de trabajo fuera de las horas lectivas. La pasión por la tecnología une a todos estos menores, repartidos al 50% entre chicos y chicas.

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DISEÑO INTEGRAL

"Quedamos durante cuatro meses los recreos de los martes y los jueves y alguna tarde tuvimos que currar muchas horas para tener todo a punto", contaba Javier, profesor de Tecnología en el colegio Divina Pastora de Ourense. Es la primera vez que este centro participaba en el concurso. Pedro, uno de los integrantes del equipo, contaba que lo más difícil fue la "programación"

Cada equipo planteó una forma de diseño diferente: desde redes a coladores, pasando por piezas impresas, como el ideado por el equipo del colegio Santa María del Mar de A Coruña, el centro ganador en la primera edición. "Usamos impresoras 3D, electrónica, placas...", contaba Cristina. Su compañera, Andrea, explicó que su sistema "se inspira en el diafragma de una cámara de fotos, con cinco pestañas que se abren y cierran gracias a unos engranajes accionados por un motor".

PROPUESTAS GANADORAS

Finalmente, la propuesta ganadora fue la del CPR Nuestra Señora del Carmen, de Betanzos (A Coruña). Su dron fue el que consiguió llevar a cabo la misión en el menor tiempo.

Hubo reconocimientos para otros cuatro equipos: el CPR Divina Pastora, de Ourense, recibió el premio al mejor diseño. El IES Carlos Casares, de Vigo, a la solución más disruptiva. Por su parte el IES de Ames consiguió el premio a la destreza en vuelo y el CPR de Montespiño, en A Coruña, a la mejor presentación