Continúa el error en la medición de la Calidad del Aire en Badajoz a pesar de haberse desconectado el sensor averiado
Un fallo técnico en un sensor, ya desconectado, generó durante días una alarma injustificada al mostrar niveles de contaminación propios de grandes catástrofes ambientales, niveles que nunca existieron.

Esabel de Vega, Responsable de REPICA
Badajoz - Publicado el
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Desde hace varios, un ficticio manto de polución parece haberse cernido sobre los mapas de calidad del aire de España, señalando a la ciudad de Badajoz como el punto más contaminado del país. Las gráficas, consultadas por ciudadanos y reproducidas por plataformas internacionales, presentaban unos valores alarmantes que situaban a la capital pacense a la par de megaciudades como Delhi. Sin embargo, la realidad era muy distinta. La alarma social generada tiene su origen en un error técnico, un sensor defectuoso que ha sido temporalmente desconectado para restablecer la verdad ambiental y la tranquilidad ciudadana. La Estación de la capital pacense aparece como desconectada en la web del Ministerio, pero otros servicios privados no han actualizado la información.
la explicación
La situación de alerta llegó a los móviles de muchos ciudadanos a través de servicios como The Weather Channel, que mostraban para Badajoz una condición "extremadamente peligrosa". Este lunes, en Mediodía COPE, la voz autorizada de Isabel de Vega, responsable de la Red para la Vigilancia e Investigación de la Calidad del Aire de Extremadura (REPICA), aportaba la clave para disipar la confusión. De Vega explicó que se trataba de un sensor erróneo que estaba proporcionando valores anormalmente altos de partículas en suspensión, unos datos tan inhabituales que solo coinciden con escenarios extremos como la zona cero de un incendio forestal de grandes dimensiones.
La magnitud del error técnico era de tal calibre que resultaba incontestable. El indicador de calidad del aire llegó a marcar un índice de 188, considerado "perjudicial para la salud", al superar los 300 microgramos por metro cúbico (µg/m³) de partículas PM10. Para poner esta cifra en su justa perspectiva, la legislación europea establece el umbral de los 50 µg/m³ como el límite máximo de seguridad para un día completo. Los registros habituales en Badajoz, de hecho, rara vez superan este último valor, por lo que la lectura errónea suponía multiplicar por seis un límite ya de por sí restrictivo.
Estas partículas PM10 son materiales sólidos o líquidos extremadamente finos, invisibles al ojo humano, cuya peligrosidad reside en su capacidad para penetrar profundamente en el sistema respiratorio. En concentraciones reales y tan descomunales como las erróneamente reportadas, suponen un riesgo grave para la salud pública, pudiendo agravar dolencias como el asma, la bronquitis o provocar problemas cardiovasculares en los grupos más vulnerables. De ahí la lógica preocupación inicial de quienes consultaron los datos. La discrepancia entre lo que mostraban los gráficos y lo que se respiraba en las calles, no obstante, era ya una pista del desfase.
La explicación técnica, según detalló De Vega a este medio, radicaba en un problema de comunicaciones del analizador. El dispositivo llevaba transmitiendo valores inválidos desde hacía "tres o cuatro días". Mientras que la Junta de Extremadura, a través de REPICA, tenía estos datos invalidados en su sistema interno al detectar la anomalía, la plataforma del Ministerio para la Transición Ecológica los seguía recibiendo como válidos y, consecuentemente, los volcaba a los mapas de consulta pública. Esta desconexión entre sistemas fue la que permitió que el dato erróneo se propagase.
Ante la persistencia del fallo y para cortar de raíz la desinformación, la Consejería de Agricultura, Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura tomó la decisión más sensata: dar de baja temporalmente la estación de medición en el índice oficial. Esta medida, preventiva y efectiva, evita la difusión de datos irreales mientras los técnicos localizan y corrigen la avería en la cabina de control. Se trata de un protocolo estándar que prioriza la veracidad de la información y el bienestar ciudadano.
el aire en toda Extremadura es la envidia de otras comunidades autónomas
Responsable de REPICA
Isabel de Vega quiso lanzar un mensaje de tranquilidad a la población, subrayando que el aire de Extremadura "sigue siendo la envidia de otras comunidades autónomas". La responsable regional confirmó que, una vez solucionado el problema técnico, la estación volverá a conectarse al sistema nacional para seguir proporcionando la información fiable que siempre ha caracterizado a la red de vigilancia. El incidente, por tanto, no solo no resta credibilidad al sistema, sino que demuestra la existencia de protocolos de actuación para garantizar que la información que llega a la ciudadanía es rigurosamente cierta. La calidad del aire en Badajoz sigue siendo, afortunadamente, excelente. La tormenta, al final, solo existió en los circuitos de un sensor.