Los hosteleros del Puerto de Navacerrada están en pie de guerra porque sus negocios se van a pique. Después de todo lo que han aguantado en este 2020, les ha llegado la puntilla en plena temporada alta. Y es que llevan dos fines de semana sin facturar apenas: primero se cortó la carretera de acceso y ahora no se permite aparcar a los madrileños.

Castellanoleoneses sí, madrileños no. Todos los que han intentado acceder al aparcamiento del alto serrano el sábado o el domingo han tenido que darse la vuelta. La Guardia Civil ha controlado este estacionamiento, que está en territorio del municipio segoviano de La Granja, aunque lo mantiene la Comunidad de Madrid.

La excusa, el cierre perimetral de Castilla y León, pero los negocios que hay en el Puerto están todos en territorio madrileño. “Si dejan aparcar a la gente de Segovia, cuando la gente de Segovia se toma el café, está entrando en Madrid; y si dejan aparcar a la gente de Madrid, solo está dejando el coche en Segovia porque está consumiendo y disfrutando en Madrid”, explica Álvaro Fernández, uno de los hosteleros afectados. “Y, ¿qué pasa? ¿El cierre perimetral es solo en fin de semana? Porque a diario nadie controla nada”.

Esta situación se produjo este fin de semana. El pasado, directamente se cortó la carretera de acceso desde Madrid, sin previo aviso, de un día para otro y sin justificación... y en los negocios, todo el mundo de brazos cruzados. “ Tengo el doble de personal y de gastos que en verano y nos estamos jugando el pan de toda esa gente”, apunta Álvaro, quien dice no entender por qué “se arruina a los negocios de la zona”. “El planteamiento es cerrar o hacer un ERTE o mandar a la gente al paro directamente porque el Puerto de Navacerrada vive en un 99% de los madrileños”.

Los hosteleros amenazan con movilizaciones si continúan estas restricciones porque hay muchos empleos que dependen de ese turismo.