El gremio de carniceros de Barcelona garantiza la seguridad del cerdo y anticipa una bajada de precios inminente

El presidente del gremio de carniceros, charcuteros y avicultores de Barcelona y comarcas, Antoni Gálvez, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los consumidores tras la detección de un brote de peste porcina africana (PPA) en jabalíes en la zona de Collserola. Gálvez ha asegurado que la situación está totalmente controlada, que no existe ningún tipo de riesgo para el consumo humano y que, paradójicamente, este escenario provocará una bajada en el precio de la carne de cerdo para el consumidor final en los próximos días.

Confianza plena en el mostrador

Según ha explicado Gálvez, la reacción en las carnicerías ha sido de absoluta normalidad. La clientela, la mayoría, por no decir casi nadie, pregunta, afirma el presidente del gremio. Atribuye esta calma a la fuerte confianza que los consumidores depositan en sus carniceros de referencia. Ya saben que nuestros canales de distribución son totalmente transparentes y no hay problema, ha añadido, subrayando la profesionalidad y el reconocimiento del sector.

El precio del cerdo, a la baja

La consecuencia más inmediata y notoria de esta crisis sanitaria será económica. El brote ha activado un protocolo de seguridad que incluye la prohibición de exportar carne de cerdo hasta, previsiblemente, el 26 o 28 de febrero. Teniendo en cuenta que un porcentaje muy elevado del cerdo que se produce en Cataluña se destina a mercados exteriores, esta medida generará un importante excedente que deberá ser absorbido por el mercado interior, lo que se traducirá en una caída de los precios.

Este efecto, de hecho, ya se ha empezado a notar en el ámbito profesional. Gálvez ha confirmado que el precio ha bajado ya dos veces esta semana y de forma muy significativa. Sin embargo, este descenso todavía no ha llegado al consumidor final, algo que se espera que ocurra a partir del próximo martes, primer día hábil de la semana. El ajuste afectará sobre todo a piezas como el lomo o el espinazo, destinadas a la fabricación y exportación, y no tanto a los productos de consumo interior directo.

El precio ha bajado ya dos veces esta semana y de forma muy significativa"

Un brote localizado y sin riesgo sanitario

Antoni Gálvez ha insistido en que el riesgo sanitario para la población es inexistente, ya que el brote está muy centralizado y muy localizado en la población de jabalíes de Collserola, sin que haya afectado a ninguna explotación ganadera. En este sentido, ha elogiado la gestión de la Generalitat: "Creo que, por una vez, se han hecho las cosas muy bien desde el departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca". La contención ha sido inmediata y efectiva, según sus palabras.

La seguridad es tal que Gálvez ha afirmado de manera contundente que no hay ni una sola granja afectada en toda Cataluña, ni siquiera dentro del radio de exclusión de 20 kilómetros que se ha establecido por precaución. "No hay ni una granja que tenga ni tan solo dudas", ha remarcado, despejando cualquier interrogante sobre la calidad y seguridad de la carne que llega a los establecimientos. Esta afirmación busca aportar la máxima serenidad a la ciudadanía.

No hay ni una granja que tenga ni tan solo dudas"

Además de la rápida actuación administrativa, existen barreras físicas que ayudan a contener a los jabalíes, como la autopista C-58 o la vía del tren, que dificultan su expansión. Aun así, el presidente del gremio ha hecho un llamamiento a la responsabilidad ciudadana, pidiendo a la gente que, por precaución, evite visitar la zona de Collserola en los próximos días para no interferir con las labores de control ni correr riesgos innecesarios.

Finalmente, Gálvez ha reiterado el compromiso inquebrantable del sector con la seguridad alimentaria, mencionando los controles "brutales" que se aplican en las explotaciones ganaderas. Ha descrito gráficamente que para acceder a una granja hay que vestirse "de astronauta", en referencia a las estrictas medidas de bioseguridad. "Si tuviésemos la más mínima duda, lo diría. Es que no hay problema", ha concluido, asegurando que el sector sería el primero en retirar el producto ante la más mínima alerta sanitaria, la cual sería inmediata por parte del Departamento de Salud.