Claves para triunfar en la ITV: estas son las multas que te pone tráfico por llevarla caducada
La ITV es como un chequeo médico para tu vehículo, y uno de los puntos que más atención recibe son los neumáticos.

no olvides la pegatina de la ITV (distintivo V-19), que debe estar visible en la esquina superior derecha del parabrisas.
Barcelona - Publicado el - Actualizado
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Si alguna vez has llevado tu coche a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en España, seguro que has sentido esa mezcla de nervios y esperanza porque todo esté en regla. La ITV es como un chequeo médico para tu vehículo, y uno de los puntos que más atención recibe son los neumáticos. Pero, ¿por qué es tan importante que los neumáticos del mismo eje sean de la misma marca?
Neumáticos del mismo eje: ¿por qué la misma marca?
Cuando llegas a la ITV, los técnicos no solo miran si tus neumáticos están gastados o no. Según la normativa española, los neumáticos instalados en un mismo eje (delantero o trasero) deben ser idénticos en marca, modelo, medidas, índice de carga y código de velocidad. ¿El motivo? Seguridad, pura y dura.

Cada neumático tiene un diseño específico, con un dibujo, compuesto y características que afectan al agarre, la estabilidad y la respuesta del coche en diferentes condiciones
Cada neumático tiene un diseño específico, con un dibujo, compuesto y características que afectan al agarre, la estabilidad y la respuesta del coche en diferentes condiciones, como lluvia o curvas. Si los neumáticos de un mismo eje son de marcas distintas, podrían comportarse de forma desigual, aumentando el riesgo de perder el control del vehículo.
Los neumáticos deben cumplir con las medidas homologadas que aparecen en la ficha técnica del vehículo
Imagina que en una frenada de emergencia, un neumático Michelin y otro de una marca distinta reaccionan de forma diferente. Esto podría desestabilizar el coche, especialmente a altas velocidades o en superficies resbaladizas. Por eso, la ITV es estricta en este punto: si los neumáticos del mismo eje no coinciden, te marcarán un defecto grave, lo que significa que no pasarás la inspección hasta que lo soluciones. Además, los neumáticos deben cumplir con las medidas homologadas que aparecen en la ficha técnica del vehículo, y el dibujo debe tener una profundidad mínima de 1,6 mm. ¡Ojo con esto, porque unos neumáticos en mal estado son una de las principales causas de rechazo en la ITV!
¿Qué más revisan en la ITV?
Pasar la ITV no es solo cuestión de neumáticos. Los técnicos hacen un repaso exhaustivo para asegurarse de que tu coche es seguro y cumple con la normativa de emisiones. Algunos de los elementos clave que revisan son:
Frenos: Comprueban que las pastillas, discos y el sistema de frenado funcionen correctamente. Unos frenos en mal estado son un peligro para ti y para los demás.
Luces y señalización: Todas las luces (faros, intermitentes, antiniebla, freno) deben estar operativas y bien alineadas. Si una bombilla está fundida, no pasarás.

Todas las luces (faros, intermitentes, antiniebla, freno) deben estar operativas y bien alineadas.
Suspensión y dirección: Revisan que no haya holguras y que el coche mantenga la estabilidad.
Emisiones contaminantes: Los vehículos diésel y gasolina pasan una prueba para medir los gases de escape. Si tu coche contamina más de lo permitido, te mandarán al taller.
Cinturones de seguridad y airbags: Deben estar en buen estado y sin daños visibles.
Carrocería y chasis: No puede haber corrosión grave ni daños estructurales.
Documentación: Lleva siempre la ficha técnica y el permiso de circulación, porque sin ellos no te harán la inspección.
Y, por supuesto, no olvides la pegatina de la ITV (distintivo V-19), que debe estar visible en la esquina superior derecha del parabrisas. No llevarla puesta, aunque la ITV esté en regla, puede costarte una multa de 80 euros.
Multas por no tener la ITV al día
Ahora hagas lo que hagas, no te la juegues circulando con la ITV caducada. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), conducir con la ITV vencida es una infracción grave que conlleva una multa de 200 euros (100 euros si pagas pronto, en los 20 días siguientes a la notificación). Si la ITV es desfavorable (defectos graves) y sigues circulando, la multa es también de 200 euros. Pero si la ITV es negativa (defectos muy graves que impiden circular), la sanción se dispara a 500 euros, y el vehículo puede ser inmovilizado. Además, no llevar el permiso de circulación te costará 60 euros, y circular sin la pegatina, como ya dijimos, 80 euros.
Lo peor no es solo la multa: si tienes un accidente con la ITV caducada, tu aseguradora podría lavarse las manos y no cubrir los daños, dejándote con un buen problema económico y legal. Y ojo, porque incluso si el coche está aparcado en la calle, pueden multarte por no tener la ITV en regla, ya que todos los vehículos matriculados deben cumplir esta obligación, según el Reglamento General de Vehículos.

Sin embargo, puedes intentar recurrir la multa a través de la Sede Electrónica de la DGT
¿Retiran la multa si pasas la ITV al día siguiente?
Si te multan por ITV caducada, pasar la inspección al día siguiente no hará que la multa desaparezca automáticamente. La sanción se impone porque, en el momento en que te pararon, el vehículo no estaba en regla. Sin embargo, puedes intentar recurrir la multa a través de la Sede Electrónica de la DGT, por correo postal o en una Jefatura de Tráfico, presentando pruebas como la cita previa para la ITV o el justificante de que la pasaste inmediatamente después. Si demuestras que hubo circunstancias excepcionales (por ejemplo, falta de citas disponibles), un juez podría anular la multa, pero no es algo garantizado.
¿Qué pasa si te paran camino a la ITV con la ITV caducada?
Si la Guardia Civil o la Policía te para mientras vas a la estación de ITV con la inspección caducada, la normativa no hace excepciones: te multarán con 200 euros. Aunque tengas cita previa para ese mismo día y estés yendo a la ITV, la ley es clara: no puedes circular con la ITV vencida, salvo que sea para llevar el coche al taller en caso de ITV desfavorable. En este caso, los agentes también pueden retirar el permiso de circulación y darte un volante que te permite circular solo para ir a la ITV en un plazo de 10 días. Si no pasas la inspección en ese tiempo, podrían inmovilizar el vehículo.
¡No lo dejes para el último momento!
La ITV es una responsabilidad que no puedes pasar por alto. Para evitar sustos, revisa la fecha de caducidad en la pegatina del parabrisas, la ficha técnica o la app miDGT. Puedes pasar la ITV hasta 30 días antes de que caduque sin que afecte a la próxima fecha de inspección, así que planifícate con tiempo. Un coche en buen estado no solo te ahorra multas, sino que te mantiene seguro a ti y a los demás en la carretera. ¡Cuida tus neumáticos, revisa tu coche y no dejes que la ITV te pille desprevenido!