Lleida busca su lugar en el fútbol y Manolo González muestra su señorío

Los caracoles de Lleida bien valen un esfuerzo. O dos. Con los 65 años desde la creación de COPE Lleida a cuestas, y con el sorteo caprichoso que emparejó al 'nuevo' Atlètic Lleida y Espanyol en la Copa del Rey, el Tiempo de Juego estuvo todo el día en la capital de la Terra Ferma para vivir un jueves de otoño. 

Bastó con entablarse con los radiofónicos de Lleida para descubrir la complejidad del momento futbolístico que vive la ciudad. Con el Lleida Esportiu agonizando en la cola de Tercera, los bríos del Atlétic Lleida que llegan desde el Ayuntamiento deben encontrar un acomodo en la sociedad, en el poble, para que ambientes como el de anoche en el Camp d'Esports se repitan más a menudo. La conclusión generalizada es la siguiente: "No se puede seguir así, con dos clubes a la greña, con aficiones dispares... Lleida debe tener un club fuerte y volver a rondar la Liga Hypermotion, que es donde merecería estar". Ojalá sea así. Si la fiereza con la que el público que ayer animó al Atlétic Lleida para defender "al Barça" ante los cánticos de los pericos se utilizara para seguir el día a día de esta entidad todo sería más fácil. Pero, claro, doctores tiene la Iglesia.

La cuestión era ver un partido de fútbol, saber si los de Gabri ("pedazo de entrador", Manolo dixit) iban a plantearle cara al Espanyol. Entre calvos andaba el juego. Y bien que lo hicieron los locales, a lomos del empuje de Moró Sidibe y de sus compañeros. García Verdura le regaló un penalti al Espanyol y luego fue Ángel Fortuño el que devolvió el presente para el 1-1 madrugador. Es el momento de echar una mano al portero del Espanyol. "Es un porterazo. Para mucho", dicen todos. Y seguro que es así. Así que hay que persistir con él. Será el portero de la Copa hasta el último día y tarde o temprano será el guardameta del Espanyol para muchos años.

Con el empate sorprendente y el paso de los minutos, Manolo González detectó en su foro interno si los suplentes había respondido a esa hambre competitiva que habló en la previa. El técnico confesó en sala de prensa que sí, que se daba por satisfecho por la entrega en un terreno de juego no apto para florituras. Sin quitarle razón al entrenador, no parece que la alineación de Mendizorroza difiera mucho de la que ustedes tienen en la cabeza desde hace días. Habrá más Copa y más minutos para los méritos cuando llegue el mes de diciembre. El sortero de la próxima eliminatoria se va a a celebrar el 11 de noviembre.

Acabó el partido y la comunión entre los futbolistas de ambos equipos no se tradujo en paz en la grada. Los Mossos quisieron retener a los animosos 300 pericos para que el desalojo pudiera ser correcto y sin incidentes. Pese a que nada grave sucedió resulta evidente que las decisiones de la policía autonómica catalana en cuanto hay que tratar a la afición blanquiazul no son las más acertadas.

El día acabó en sala de prensa con Manolo González pidiendo la palabra. "Quiero expresar de nuevo mi recuerdo eterno al periodista Dani Badia, que ya nos dejó hace un tiempo. Fue un señor conmigo el tiempo que estuve aquí...". El homenaje al que fue nuestro compañero en Catalunya Ràdio llenó de aplausos la pequeña sala. Recibo un mensaje de un gran comunicador barcelonés: "Qué entrenador tenemos...". Mucha razón. Lleida se queda atrás, el Atlètic recibirá en familia al Castellón B el domingo a las 17:00 ("vamos a pagar caro el esfuerzo de hoy", se escucha en los pasillos). A esa hora ya estará jugando el Espanyol en territorio alavesista. El fin de semana separa unos caminos que ayer se unieron por un par de horas. El Espanyol debe seguir por su senda. El Atlètic está obligado a encontrar un relato para que Lleida se crea que ahí está el punto de partida para que días como el de ayer pasen de ser algo especial a algo cotidiano.