Una aldea de Cantabria busca dueño por un millón de euros: "Que se relance la zona, que dé trabajo a su gente"
Un empresario madrileño vende 20 cabañas pasiegas en Vega de Pas que compró tras la pandemia, con el sueño de devolver la vida a este rincón rural

Ignacio Ruiz explica en COPE por qué vende una aldea entera con 20 cabañas en la Vega de Pas
Santander - Publicado el - Actualizado
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Imagina el poder comprar una aldea entera en Cantabria. Pues esta curiosa iniciativa es posible. El empresario madrileño Ignacio Ruiz ha puesto a la venta todo un barrio de cabañas pasiegas en Vega de Pas por un millón de euros.
La propiedad, que se extiende por más de 90.000 metros cuadrados y cuenta con una veintena de cabañas y edificaciones, es el resultado de un proyecto personal que comenzó como un refugio tras la pandemia del coronavirus.
La historia de este singular proyecto inmobiliario comenzó cuando Ruiz, quien siempre había veraneado en la costa de la región, descubrió el interior: "A partir de la pandemia me escapé ese verano, estuve rodando por el interior de Cantabria y fue lo que me enamoró", ha explicado en una entrevista en "Herrera en Cope en Cantabria".
En ese entorno encontró un "sitio en el que refugiarse", un sentimiento que cree que fue compartido por muchos tras la crisis sanitaria.

El entorno en el que se encuentran las cabañas es espectacular
Un proyecto "sin querer queriendo..."
Lo que empezó con la compra de una cabaña para uso personal fue creciendo de forma casi espontánea. Según ha relatado Ruiz, fue un proceso "como sin querer queriendo", ya que los propios vecinos de la zona, al enterarse de su interés, comenzaron a ofrecerle sus propiedades.
Esta reacción, lejos de ser un intento de "quitarse el muerto de encima", era una esperanza para que las construcciones no se vinieran abajo.
En vez de que se caiga el tejado, que venga alguien con otra energía y lo reconstruya de forma moderna"
Empresario que pone a la venta una aldea en Vega de Pas
Los antiguos propietarios veían en él una oportunidad. Deseaban que alguien recuperara "la cabaña en la que yo he nacido, en la que nació mi madre" y que, "en vez de que se caiga el tejado, puede venir alguien con una energía nueva, con una energía bonita, y puede reconstruir esto de una forma moderna", ha detallado el empresario.
Poco a poco, reinvirtió el dinero de su negocio y su familia hasta agrupar una veintena de edificaciones.

Muchas de las cabañas deben ser rehabilitadas
la aldea busca un inversor
Aunque su idea inicial era arrancar él mismo un proyecto de rehabilitación, la envergadura de la inversión le ha hecho cambiar de planes: "Cuando he ido echando números, pues realmente no solo hace falta ilusión y ganas, sino que hace falta un poder adquisitivo fuerte", ha confesado.
Por ello, ahora busca un comprador, ya sea una empresa o una multinacional, con los recursos necesarios (arquitectos, abogados y músculo financiero) para desarrollar el potencial de la aldea.
¿Un comprador...? Moscas hacen ruido, pero de momento no hay nada en serio"
Empresario que pone a la venta una aldea en Vega de Pas
La venta se gestiona a través de "Espazio Inmobiliario", cuya responsable, Mila Maldonado, contactó con Ruiz interesada por una sola cabaña. La sorpresa llegó cuando el propietario le desveló la realidad de su posesión: "Hombre, realmente tengo un barrio entero...", le contestó.
Se trata, en sus palabras, de una "aldea tradicional", un núcleo que, aunque administrativamente es un barrio de Vega de Pas, tiene su propia entidad.

La operación de compraventa asciende al millón de euros
un futuro que dé vida a la zona
Ignacio Ruiz no quiere que el lugar caiga en manos de cualquiera. Su deseo es seleccionar a un comprador que entienda el valor del enclave y que recoja el "testigo" que a él le pasaron los antiguos dueños. Espera que se desarrolle "un proyecto bonito que relance la zona, que dé trabajo a la gente de allí y sobre todo que muestre la naturaleza que hay allí, que es exuberante".
Por el momento, el anuncio ha generado interés, pero no hay ninguna oferta en firme sobre la mesa. Como ha concluido el propio Ruiz, "moscas hacen ruido, pero de momento no hay nada en serio". La aldea pasiega de Pandacebo sigue, por tanto, a la espera de un nuevo propietario que le insufle vida.

Ignacio Ruiz quiere que un inversor revitalice la zona dando trabajo a sus vecinos
                
                        
                    


